El perfil del contratante de la Junta de Andalucía ha publicado la adjudicación del contrato de redacción de proyecto y dirección obra para la instalación de un punto de recarga para vehículos eléctricos en los doce puertos de gestión autonómica. Este contrato se ha concedido a la Unión Temporal de Empresas formada por Estudio 7 Soluciones Integrales S.L. y Arana y Muñoz Edita S.L. con un coste de 78.522 euros.
El contrato, que está financiado con fondos REACT-EU, tiene como objetivo sentar las bases para la implantación de puntos de recarga para vehículos eléctricos o híbridos enchufables en los puertos de puertos de titularidad directa de la Junta, a través de la Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA). Para ello, la UTE adjudicataria realizará un estudio previo del cálculo de ahorro de la huella de carbono evitada con la futura puesta en funcionamiento de los puntos de recarga. Posteriormente, elaborará un estudio de viabilidad, con visitas a cada uno de los recintos portuarios para conocer sus particularidades y aportar diversas soluciones de implantación.
Por último, se redactará el proyecto técnico, que no sólo incluye la instalación de los puntos de recarga para vehículos eléctricos, sino también los captadores fotovoltaicos para autoconsumo como sistemas de sombra para dichos puntos de recarga.
La aplicación de esta medida contribuirá a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero que se derivan del uso de vehículos a motor y contribuir a la protección del medio ambiente. Estos puntos de recarga para vehículos eléctricos se implantarán en los puertos de Garrucha, Roquetas de Mar y Adra, en Almería; Caleta de Vélez, Fuengirola y Marina La Bajadilla, en la provincia de Málaga; Barbate, Rota y Chipiona, en Cádiz y Mazagón, Isla Cristina y Ayamonte en Huelva.
El transporte es responsable de más del 30 por ciento de las emisiones de dióxido de carbono en la Unión Europea, de las cuales el 72 por ciento proviene del transporte por carretera. Como parte del objetivo de reducir las emisiones de dióxido de carbono, la Unión Europea se ha comprometido a disminuir las que provienen del transporte un 60 por ciento por debajo de los niveles de 1990 para 2050.