La Empresa Municipal de Movilidad (Emasa) de Cádiz ha contratado la instalación de un desfibrilador externo semiautomático (DESA) en uno de los vehículos que presta servicio en el control de las zonas azules, naranjas y verdes de la ciudad.
El desfibrilador está disponible para ser utilizado en la atención de cualquier persona que pueda necesitarlo en caso de parada cardíaca, según ha informado este sábado el Ayuntamiento de Cádiz en un comunicado en el que ha remarcado que "la rápida actuación en este tipo de situaciones puede marcar la diferencia en la supervivencia de la persona afectada", de forma que esta medida "contribuirá a mejorar la atención a los ciudadanos y a ofrecer un valor añadido al servicio que se presta", según han defendido desde el Consistorio.
El desfibrilador tipo DESA es "fácil de utilizar, incluso por personas sin formación médica específica", según ha aclarado también el Ayuntamiento gaditano, que ha explicado que el dispositivo cuenta con una guía de voz que indica los pasos a seguir para utilizarlo de manera correcta en caso de emergencia.
Además, se ha realizado una formación específica al personal encargado del vehículo en el uso del dispositivo, "para poder actuar de manera eficaz en caso de emergencia".
La adquisición de este dispositivo se une a los espacios cardioprotegidos creados en la oficina central de la empresa y en el aparcamiento del polideportivo Ciudad de Cádiz-Cortadura. Ambos cuentan con dispositivos DESA y con la formación del personal adscrito a estas instalaciones para su uso.
Con esta iniciativa, Emasa quiere "mostrar su compromiso con la sociedad y su responsabilidad social corporativa".