El alcalde de Cádiz, José María González, Kichi, ha invitado a los participantes del Congreso de la Lengua Española “que estén al liquindoy, aprovechen la collá y la conviá y disfruten bien del tangai para que cuando les toque guasnajarse puedan decir con tranquilidad y orgullo que ha sido un bastinazo”.
Kichi, que intervino para dar la bienvenida en el acto celebrado en el Gran Teatro Falla, con la presidencia de los Reyes, expresó “las ganas, ilusión, alegría y hospitalidad siempre afinada” con la que la ciudad acoge esta cita internacional.
Con un emotivo recuerdo al pueblo peruano, al que deseó que puedan disfrutar “sin sobresaltos y con seguridad” la edición de 2025, ha admitido “que no ha sido fácil organizar” el evento internacional “a contrarreloj” y con meses de “intensísimo trabajo”. Pero ha agradecido especialmente al concejal de Presidencia, Paco Cano, y su equipo, que haya sido posible cumplir con la responsabilidad.
Confía asimismo en el éxito porque Cádiz ofrece, además de los espacios necesarios para una cita de trascendencia universal, “poso de diversidad, de mezclas, de encuentro, de idas y vueltas” que se muestran en “la arquitectura” de la ciudad, “en su carácter abierto, en su sentido del humor y del trabajo”, que enlaza con los asuntos fundamentales que se abordarán en el Congreso, el mestizaje y la multiculturalidad.
“Cádiz es viva, intensa, trepidante y relativa a la vez, porque sabe detener el tiempo, sabe mirar al mar”, ha agregado y ha remarcado la conexión con “los pueblos americanos, con la civilización maya, con los gitanos, con el árabe que estuvo por aquí” presentes en el habla gaditana.
Además, concluyó, Cádiz ofrece “una luz distinta, especial, única, que alimenta los contrastes y la perspectiva, que se refleja en el mar en el que se pierde nuestra orilla abriéndose a nuevas realidades, a nuevos mundos, nuevas influencias”.
