El Consejo de Ministros, en su reunión de este martes pasado y a propuesta del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, autorizó licitar dos contratos para la construcción de la fase II de la Nueva Terminal de Contenedores del Puerto de Cádiz y de la segunda fase del túnel de acceso a la misma, con una inversión global cercana a los 80 millones de euros (IVA no incluido). La la presidenta de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, Teófila Martínez, se felicitó por esta decisión que garantiza la competitividad futura del Puerto, junto con la profundización de la canal de navegación de acceso y la conectividad a través del corredor Central y Mediterráneo por doble vía electrificada. La conexión ferroviaria, demanda de los operadores vinculados a las instalaciones de la APCB durante casi dos décadas también encara su recta final. A finales del pasado mes de mayo, Adif adjudicó a Thales España el contrato para la redacción del proyecto constructivo y ejecución de obras de las instalaciones de sistemas de control de tráfico, señalización, seguridad y telecomunicaciones fijas y móviles del nuevo ramal de acceso al Bajo de la Cabezuela en Puerto Real. La actuación, con una inversión de 7,3 millones de euros, cuenta con un plazo de ejecución de 24 meses, de los que seis meses se destinan a la redacción del proyecto y 18 meses a realización de las obras.
Los pasos en firme han llevado a las empresas instaladas a solicitar autorización de su actividad. La última de ellas, Almacenes Marítimos del Sur Cádiz SL, que, de acuerdo a lo publicado en el BOE el 4 de julio, ha pedido la modificación sustancial de concesión administrativa para ampliar la ocupación de terrenos e incluir el depósito de utillaje y el desarrollo de operaciones de carga y descarga de mercancía a granel en ferrocarril.
Tanto las inversiones comprometidas como el interés suscitado en torno a las mismas ha llevado a agotar el suelo disponible. Actualmente, hay catorce concesionarios en Bajo de la Cabezuela, entre ellos Dragados Offshore y Navantia, si bien ambas firmas ocupan una mínima superficie. El resto, como Astigi, Portillo o Puma Energía (que también tramita la ampliación de ocupación de terreno para la instalación de un parque de energía solar térmica) han desarrollado 153.365 metros cuadrados de naves para almacenamiento de graneles sólidos y 184.909 metros cúbicos de almacenaje para graneles líquidos con una inversión privada total que asciende a más de 100 millones de euros, en la que se suma la inversión en grúas móviles, entre otras dotaciones. Están pendientes, además, construir las naves del grupo logístico argentino PTP, que destinará a tal efecto otros 16,5 millones. Fuentes de la APBC indican que “este desarrollo industrial y empresarial, además de contribuir a la generación de tráfico portuario, tiene un impacto en la generación de empleo de alrededor de 10.000 puestos de trabajo directos, indirectos e inducidos.
Pero todo esto tiene su reverso: el problema es que solo queda disponible un 10% del suelo, unos 135.000 metros cuadrados fuera de la zona de control de acceso, de ahí que, cuando el Consejo de Administración de la APBC aprobó el pliego para sacar a concurso la última parcela dentro del recinto aduanero de Puerto Real, de 77.000 metros cuadrados, se presentaran hasta tres proyectos por parte de Dragados Offshore, PTP y Olivia Energy Group.
La APBC ha insistido, por ello, en la “imperiosa necesidad de hacer efectiva cuanto antes la resolución de la expropiación con la puesta a disposición de los terrenos de Delphi”, ya que “queda patente que la demanda actual de suelo triplica en este caso concreto la oferta”. La finca, propiedad del Cádiz CF y donde proyecta con un fondo de inversión la construcción de una ciudad tecnológica del deporte, sería puesta, tal y como avanzó la propia Teófila Martínez, a disposición de Lógica, relevo del Consorcio Las Aletas, para la creación de una estación intermodal y usos logísticos, tecnológicos e industriales. “Hoy los puertos, por muy grandes que sean, necesitan del territorio y de espacios logísticos suficientemente eficientes y atractivos para poder ser realmente competitivos” y Lógica, “por su ubicación, extensión y concepto se plantea como el espacio ideal de desarrollo logístico, tecnológico y ambiental”, declaró al respecto la presidenta de la APBC el pasado mes de mayo.