Según reveló ayer el Institute of Physics (IOP) en su web, el valor del hallazgo radica en la demostración de que la superconductividad, resistencia nula al paso de corriente eléctrica, puede inducirse en un sólo día, cuando son necesarios varios meses.
“Los componentes con hierro se vuelven superconductivos tras estar expuestos varios meses al aire, lo que es mucho, mucho tiempo”, explicó uno de los científicos del proyecto, Yoshihiko Takano, que celebró el avance que ha supuesto este experimento.
“La muestra sumergida en vino tinto, sin embargo, se torna superconductiva en un sólo día, mucho más rápido que en la exposición aérea.
Las bebidas alcohólicas utilizadas en el experimento son el vino tinto y blanco, la cerveza, el sake japonés, y el whisky, que tras calentarse a 70 grados durante 24 horas, sirvieron de solución para sumergir piezas con hierro.