La decisión tomada por la Diputación de Cádiz junto con el Ayuntamiento para rehabilitar el instituto del Rosario para acoger la Escuela de Hostelería Fernando Quiñones, dependiente de la institución provincial, ha generado reacciones encontradas en los dos partidos de la oposición en la Corporación municipal.
Óscar Torres, por parte del PSOE, considera que está bien “darle uso” al inmueble, cerrado desde hace 17 años, pero apunta que “me habría gustado que se le hubiera dado una dotación nueva que sumara a la ciudad”.
En una entrevista en La Orilla, programa que dirige y presenta Pedro Espinosa en 7TV, el portavoz socialista lamenta que, finalmente, Cádiz no gana porque lo único que se hace es “cambiar de ubicación a la Escuela de Hostelería”, sin necesidad, en su opinión, porque funciona en Zona Franca.
Por el contrario, habría aportado un nuevo atractivo al municipio, ha señalado, destinar el inmueble a sede del Centro de Estudios Constitucionales, dependiente del Ministerio de Presidencia, vinculado al legado de 1812.
David de la Cruz, sin embargo, ha valorado como “buena” la idea de trasladar la escuela de hostelería al centro de la ciudad, más todavía después de que se planteara hace unos meses llevarla a las instalaciones de El Madrugador, en El Puerto.
Pero se muestra “escéptico” con los plazos que maneja la Diputación de Cádiz al hablar de “proyecto de mandato”.
“No hay base documental, amplían los tiempos antes de empezar la obra”, ha advertido el portavoz de Adelante Izquierda Gaditana.
“Me temo que sea otra cortina de humo para disimular el maltrato del PP a Cádiz, y me temo que quede igual que el nuevo hospital, Valcárcel o la Ciudad de la Justicia”, ha agregado, al tiempo que se queja de que “estamos hartos de anuncios, queremos realidades”.