En un país en el que la palabra 'conciliación' cada vez tiene más peso, lo cierto es que en la práctica sigue siendo una gran quimera para los padres, que con la llegada del
verano y el fin de los colegios, tienen que comenzar a buscar opciones para los niños.
Según los expertos del sector, el precio medio de un campamento de verano infantil en España, para una estancia de 8 días y 7 noches, oscila entre los
350 y los 800 euros. Por supuesto, los hay más baratos y también más caros, todo dependerá de la ubicación, la calidad de las instalaciones, las actividades ofrecidas, la demanda...
¿A qué se debe este encarecimiento en tan poco tiempo?
Los campamentos de verano se han convertido en
una de las opciones más populares para los padres que trabajan en verano, los niños están entretenidos, se relacionan y, en muchos casos, se forman en actividades deportivas o lingüísticas. Los padres los ven como una oportunidad para que los niños aprendan nuevas habilidades en un entorno divertido y seguro, por lo que la demanda no deja de crecer, habiendo, en muchos casos, listas de espera larguísimas en los campamentos más populares.
Por otro lado, es una opción prácticamente obligatoria para aquellas familias en las que
los abuelos o tíos trabajan y no pueden echar una mano a los padres.
Pero además, los programas de actividades han mejorado en los últimos años, ofreciendo cada vez
opciones más completas y en unas instalaciones cada vez mejores, lo que también provoca un aumento en el precio.