El Partido Popular de Cádiz celebró en la tarde de ayer una reunión en Cádiz con los alcaldes populares y el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, donde se abordó la reforma de la Administración local.
Acompañado del presidente del PP de Cádiz, Antonio Sanz, Beteta ahondó con los regidores populares qué significará esta reforma para los ayuntamientos, incidiendo en el principio básico de “una administración, una competencia”. En este sentido, apuntó que el objetivo de la reforma integral de las Administraciones Públicas es hacerlas más austeras, efectivas y eficientes para todos los ciudadanos y al servicios de los ciudadanos. El secretario de Estado destacó que la reforma clarifica la relación financiera entre los ayuntamientos y las comunidades autónomas en la prestación de los servicios públicos, al garantizar la financiación de los mismos.
Ante las dudas y temores surgidos en torno a la reforma, durante la reunión se aclararon algunos aspectos. En este sentido, se incide en que la reforma “no es un intento centralizador del Gobierno; no hace peligrar puestos de trabajo, al contrario es su mejor garantía al garantizarse la financiación de los servicios; no se vacía de competencias a los municipios, ni se pretende privatizar servicios, y por supuesto, no conlleva una intervención del Estado sobre los entes locales”.
El objetivo de la reforma “es racionalizar las estructuras administrativas, evitar duplicidades, el solapamiento entre administraciones y dotar de financiación suficiente a las entidades territoriales para llevar a cabo los servicios públicos de su titularidad, consiguiendo además una mayor cohesión territorial”.
En este sentido, se calcula que la reforma supondrá un ahorro a los ayuntamientos gaditanos “de unos 206 millones de euros en cuanto a clarificación de competencias, eliminación de duplicidades y adecuación de los salarios de cargos públicos y reducción del personal de confianza según la población del municipio”. Una cuantía que revertirá en los servicios públicos con una mejora de los mismos.a.
“Una revolución”
Esta reforma supondrá, según el PP, “una revolución en la modernización de los servicios públicos que prestan los ayuntamientos en favor de los ciudadanos que fijará un coste estándar de cada servicio público y que evaluará las competencias”. Además, se va a racionalizar la estructura organizativa de la administración local, se va a llevar un control económico-presupuestario riguroso y se va a favorecer la iniciativa económica y la transparencia en la gestión pública.