El proyecto de ley sobre la “protección de la creación en internet” no prosperó por la ausencia de muchos diputados, incluidos del partido gobernante UMP, y el rechazo por sorpresa del texto fue aplaudido desde los escaños de izquierda.
El texto pretendía que una Alta Autoridad para la Difusión de Obras y la Protección de Derechos en Internet pudiera sancionar al usuario que descargue ilegalmente y obligarle a seguir pagando su conexión durante el período de sanción, después de haberle advertido por carta en dos ocasiones.
En una votación a mano alzada, 15 diputados se pronunciaron a favor del texto y 21 lo hicieron en contra, después de que el proyecto de ley llegara a la Cámara de Diputados revisado y endurecido por una comisión mixta de senadores y diputados.