Más del 80% de las mujeres que entran en prisión han sido víctimas a lo largo de su vida de episodios de violencia, como malos tratos y abusos, que les ha condicionado su relación con la sociedad y su evolución personal. 

Estos son algunos de los datos y consideraciones que ha realizado ayer la secretaria general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, quien presentó ayer un plan de acciones para la igualdad en el ámbito penitenciario. 

Junto a ella han estado la subdirectora general de Programas del Instituto de la Mujer del Ministerio de Igualdad, Teresa Blat, y la de Tratamiento y Gestión Penitenciaria, Concha Yagüe. 

Con el plan, Prisiones pretende acabar con las discriminaciones en el ámbito penitenciario, conocer las características de las mujeres encarceladas, atender sus necesidades y erradicar la violencia de género. 

Para su puesta en marcha ayer se constituyó una comisión técnica formada por especialistas en materia de igualdad, familia, infancia y violencia de género que, a modo de observatorio, velará por el cumplimiento del plan. 

Con estas medidas, Prisiones pretende que estas mujeres, en el tiempo que pasen en prisión, puedan “recomponer su vida”.