Como casi siempre ocurre en los plenos ordinarios que celebra el Ayuntamiento de Cádiz, el tedio que conlleva los debates de mociones y propuestas suele quebrarse en el turno de las intervenciones ciudadanas. A veces con denuncias públicas cargadas de sentimientos, otras con cuestiones personales que tratan de arañar el alma de los concejales y del alcalde, y en algunas ocasiones con la participación de vecinos que arrancan sonrisas o carcajadas por la forma de la ponencia en sí. Así ocurrió en la última sesión plenaria de la mano de José Antonio Bermúdez Tallafé, que dejó a toda la corporación con la boca abierta con una intervención que pasará a la historia de ese realismo mágico que a veces se adueña de la política gaditana.
El vecino en cuestión comenzó su intervención acercándose al micrófono para decir “Método de guitarra por tablatura. Audio 1. Probando. Sí, sí”…. Alzó la vista para inmediatamente después ponerse una venda, y, ante un salón de plenos expectante, lanzar una especie de poema entre crítico y surrealista, con pedacitos de esperpento. “La caña de pescar en Cádiz se está convirtiendo…”, silencio, lo repite en voz baja. “para aquellos que ante la frustración de no encontrar trabajo y ver el tiempo pasar, tratan al menos de compensarlo con la ilusión de algo que les pueda llegar”.
Y en ese tono, con periodos de breves pausas, respirando hondo al final de cada frase, siguió con su intervención. “No hay cualificación para las corbetas, ni manillares para el carril bicicleta… siendo natural de Cádiz, no llevo toalla a la playa ya que me seco a lo Paco Alba”. Aquí ya se escucharon las primeras carcajadas, sin disimulo ninguno, porque todavía no se sabía de qué iba la cosa.
“Aprovecho para limpiar el frigorífico cuando está vacío”, para soñar, “antes de que llegue ayer” con “una fábrica en uno de tantos solares de la Zona Franca” en la que se elaboraban por “gaditanis y algún kazaquistaní de 90 años, tortillitas de camarones de gran categoría superior” y así leer en el “cuadrante inferior derecho de la cara posterior de los envases” en letra chica, letra pequeña, letra menuda, o letra hormiga… Pisha mía, ¿para qué se quiere tener tanto si nadie te da cambio?”…. Método de guitarra por tablatura. Audio 2. Un saludo”. Y claro, los asistentes al pleno rompieron a aplaudir semejante intervención.