Un total de 28 nacionalidades diferentes están representadas en el centro penitenciario de Botafuegos, lo que la convierte, sin duda, en una de las prisiones con mayor diversidad. Llama la atención el hecho de que en 2015, VIVA CAMPO DE GIBRALTAR informaba de la presencia de hasta 40 nacionalidades en el penal algecireño, 12 más que las actuales.
En aquel entonces, los 40 países de origen de los reos superaban en dos los de 2012, cuando eran 38. Eso quiere decir que ha disminuido sensiblemente la cantidad de países representados en el penal, algo que ha ido unido, también, al importante descenso de la población reclusa desde entonces.
A fecha de 26 de mayo de 2022, el centro penitenciario contaba con 1.103 reos, una cifra bastante más equilibrada con su capacidad de la que había llegado a tener hace algunos años. Allá por 2009, la población reclusa en el penal de Algeciras alcanzó los 1.900 internos, casi el doble de las 1.008 celdas con las que cuenta la cárcel algecireña, y en 2015, cuando había 40 nacionalidades en la prisión de Botafuegos, aún eran 1.544.
Según ha podido saber VIVA CAMPO DE GIBRALTAR de fuentes penitenciarias, la relación de presos con sus distintas nacionalidades evidencia que la nacionalidad (no española) más repetida en la prisión algecireña es la marroquí, con 236 internos, un 20,4% del total de reos.
Obviamente, los españoles son amplísima mayoría en el centro penitenciario (840, un 72,6% del total). Ello quiere decir que el resto, un 27,4% de la población reclusa, son extranjeros, aproximadamente uno de cada cuatro reos entre las cuatro paredes de Botafuegos. A muchísima distancia de la población reclusa marroquí se encuentra la segunda comunidad más amplia del penal algecireño, la rumana, con 13 representantes, y que ha desbancado a la británica (11 presos) como tercera más numerosa de la prisión de Algeciras.
En 2015, los británicos eran 23 y los rumanos, 19, lo que da idea del cambio de tendencia registrado en los últimos años, que por cierto han coincidido con la votación del Brexit y su posterior aplicación. Dos nacionalidades que también mantienen una presencia relevante en Botafuegos son la argelina, con ocho representantes, y la francesa, con siete.
Pequeñas comunidades
Tras estos seis primeros países, la presencia de reos de otras nacionalidades es casi testimonial, de modo que hay hasta tres países con cuatro representantes (Gibraltar -considerado en este caso como una nacionalidad aparte-, Nigeria y Países Bajos.
En el club de los países con tres representantes, nos encontramos con dos países, Portugal y Senegal. Con dos presos, están Alemania, Colombia, Dinamarca, Iraq, Paraguay, República Dominicana y Rusia. Finalmente, tienen un único representante Austria, Bélgica, Bolivia, Cuba, Eslovenia, EE.UU, Perú, Polonia, Suecia y Ucrania.
