La madre del preso acusado la pasada semana por el sindicato CSIF de agredir a dos funcionarios de prisiones en la cárcel algecireña de Botafuegos tiene previsto a su vez denunciar a ambos trabajadores ante el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria por haber “sido agredido brutalmente”.
La mujer, quien afirmó que “estamos a la espera” de que su hijo “sea valorado por un médico forense, que certifique las lesiones de las que ha sido víctima”, aseguró que “a causa de la paliza sufrida el pasado viernes 23 de noviembre”, cree “haber perdido la visión de un ojo, estando aún a la espera de ser visto por un médico” y que incluso “le han robado unas gafas de titanio. Además, está pendiente de una “inminente y urgente intervención quirúrgica, por las dolencias graves y crónicas que padece”. A todo ello añadió que “no es respetado su tratamiento médico” y asegura que están intentando trasladarle de centro.
Para esta mujer, CSIF “manipula la información y se cambia totalmente la versión de lo ocurrido”.
A consecuencia de la agresión, desde CSIF se apuntaba que los funcionarios sufrieron, en uno de los casos, una brecha en la cabeza, y el otro un golpe en la nariz. Ambos habrían tenido que ser atendidos.
