Cuatro personas han sido condenadas a penas que suman 16 años y 7 meses de cárcel por introducir en España un alijo de 10,8 toneladas de hachís procedente de Marruecos, oculto entre cajas de sardinas congeladas.
La sentencia de la sección séptima con sede en Elche de Audiencia de Alicante tiene fecha 31 de marzo pero ha sido dada a conocer ahora a Efe, y se refiere a una operación de la Guardia Civil en Santa Pola del 9 de noviembre de 2009.
De igual modo, el fallo ha absuelto a otros seis implicados, encargados de la carga y descarga de la mercancía, al considerar que desconocían que la importación del pescado escondía el narcotráfico.
La Audiencia alicantina establece que esta operación de narcotráfico fue ideada por uno de los procesados, un empresario de Madrid dedicado a la importación de pescado que contactó con dos narcotraficantes de Marruecos para gestionar la compra de la droga.
El alijo salió de la ciudad marroquí de Agadir junto con 12 toneladas de sardinas congeladas en tres contenedores.
Un transitario del puerto de Algeciras (Cádiz), el segundo condenado, gestionó la operación mercantil "a sabiendas de su contenido", según los magistrados, y logró que otro, ajeno al delito, cediera el registro sanitario de su empresa pesquera a cambio de una comisión de 3.200 euros.
El 'cerebro' del plan contactó a su vez con un camionero (tercer penado) que se encargó de la logística, concretamente usó dos camiones para trasladar los estupefacientes y contactó con personal laboral para las tareas de carga y descarga.
La mercancía importada por el empresario madrileño implicado llegó al puerto de Algeciras el 5 de noviembre en tres contenedores, dos de los cuales salieron en dirección a Portugal mientras que el tercero llegó el día 9 a una nave industrial de Santa Pola alquilada por el grupo delictivo en un polígono.
Agentes de la Guardia Civil vigilaban todo el operativo desde primera hora de la mañana y entraron a mediodía, momento en el que detuvieron a todos los presentes y se incautaron de la mercancía, compuesta por 12.210 kilos de sardinas congeladas y de 10.800 de hachís dividido en fardos.
Junto a los tres condenados anteriormente citados, se impone cárcel a un cuarto que dirigió la descarga de la droga en la nave de Santa Pola.
Respecto a los otros seis sospechosos, la Audiencia reconoce la existencia de "algún indicio" de que pudieran conocer para qué se trasladaban desde Sevilla a Alicante, pero añade las dudas de que todos lo supieran debido al "escaso precio que se les pagaba, 150 euros" por su participación, una "duda razonable" por la que han de ser absueltos.
