Ayer concluyó el juicio oral que se ha celebrado desde el lunes en la Audiencia Provincial de Algeciras por un presunto caso de asesinato con alevosía a un joven discapacitado en La Línea en diciembre de 2013.
El Ministerio Fiscal y las acusaciones particulares piden 18 años de cárcel, más otros dos por amenazas graves para A.F.C. amigo de la víctima,. J.D.R., con quien había pasado toda la tarde y noche del 29 de diciembre tomando copas y consumiendo estupefacientes en una reñidero de peleas de gallos de La Línea y en un par de clubes de alterne de Guadacirte y Los Cortijillos.
Según mantiene el Ministerio Fiscal, basándose en la declaración del testigo principal, que estaba con víctima y presunto asesino la noche de los hechos, A.F.C. habría subido a casa para coger dinero y continuar la fiesta. Mantiene que cuando regresó portaba una pistola en la mano y disparó a la cara de J.D.R., que estaba en una silla de ruedas por un accidente sufrido en moto hacía años. Cuando intentó huir, habría vuelto a dispararle en la cabeza, ya de espaldas. El testigo ha sostenido ante el juez que lo amenazó de muerte si contaba algo de lo ocurrido.
El acusado, por su parte, ha testificado que él regresó a casa y no volvió a ver a la víctima mortal ni al testigo protegido. Asegura que tras estar unos minutos en casa, fue a casa de un vecino donde pasó la noche hasta el amanecer y que no conoció lo ocurrido hasta varios días después, cuando se encontraba en Fuengirola pasando las fiestas navideñas en familia.
Hoy el jurado comenzará a deliberar y posiblemente se conozca el veredicto. Bastará con cinco fotos a favor de la absolución. Sin embargo, para declararlo culpable, son necesarios siete votos de los nueve que conforman el jurado (más dos suplentes).
Una vez que se conozca el veredicto, el presidente de la Sala tendría que dictar sentencia. En el caso de que fuera declarado culpable, dictaría la pesa. Fiscalía y las acusaciones particulares solicitan 18 años de prisión por asesinato con alevosía y amenazas graves, y reclaman una indemnización de 120.000 euros para la familia de la víctima mortal.
