La organización, asentada en el Campo de Gibraltar y la Costa del Sol, se dedicaba al robo violento de drogas a otros grupos
Once personas han sido detenidas en una operación conjunta de la Policía y la Guardia Civil como presuntas integrantes de una organización asentada en el Campo de Gibraltar y la Costa del Sol y dedicada a los "vuelcos" o robos violentos de droga a otras organizaciones de narcotraficantes.
La organización, considerada la más importante y peligrosa detectada en España en los últimos años, actuaba en los "vuelcos" con armas de fuego catalogadas como armas de guerra.
Durante la operación se han practicado cinco registros en las localidades de Algeciras, Málaga, Fuengirola y Mijas (Málaga), han informado este martes la Policía y la Guardia Civil en un comunicado.
Han sido intervenidos dos fusiles de asalto, un subfusil, siete pistolas dos escopetas, munición y cargadores, chalecos antibalas, dispositivos de geolocalización y cámaras endoscópicas.
La investigación se inició en febrero del pasado año, cuando los agentes detectaron la existencia de organizaciones dedicadas al narcotráfico mediante la comisión de "vuelcos de droga", en los que utilizaban armas de fuego, incluidas armas de guerra.
Los robos de droga eran perpetrados de manera especialmente violenta, se usaban armas de gran potencial y dejaban tras su paso vehículos de otras organizaciones acribillados, con el peligro de los impactos de numerosas “balas perdidas” en viviendas o establecimientos ajenos al asalto.
Durante la investigación se ha podido constatar que miembros de la organización ejecutaron robos violentos en distintos puntos de las provincias de Cádiz, Alicante y Tarragona.
En esta última provincia fue en plena autopista y recurrieron para ello a potentes vehículos de alta gama, sustraídos o puestos a la titularidad de terceras personas y provistos de placas de matrícula falsas.
Para no ser detectados por los agentes, la organización realizaba cambios constantes de los vehículos de alta gama y adoptaba importantes medidas de seguridad.
Esto dificultó especialmente la investigación, además de la propia peligrosidad de la organización, que además de contar con las citadas armas de fuego protagonizaba fugas a gran velocidad en las que comprometía la seguridad de los demás usuarios de las vías, o embestía a los vehículos policiales en el caso de que los agentes intentaran interceptarlos.
Entre las detenciones practicadas destaca la del considerado jefe de la organización, que llevaba un año fugado de la acción de la justicia al tener pendiente una orden de ingreso en prisión.
Esta persona fue reconocida e identificada por los investigadores en un reportaje emitido en televisión a finales de 2018 sobre narcotráfico en el Estrecho como la persona que, ocultando parte de su rostro tras una máscara, utilizaba el sobrenombre de “Maxi” y reconocía durante su entrevista ser el jefe de una organización dedicada al tráfico de drogas que portaba armas, robaba y asesinaba.
También ha sido detenido un joven de 22 años que fue identificado como uno de los presuntos autores materiales de alguno de los robos armados que ha perpetrado esta organización.
Este joven ha sido detenido en Algeciras e ingresó en prisión tras cinco años en busca y captura tras fugarse del lugar donde estaba cumpliendo condena por homicidio, y durante el registro de su vivienda se le intervenido una pistola y un subfusil de asalto.