Manuel Montes Mira ha donado al Museo de Chiclana dos piezas relacionadas con la Batalla de la Barrosa. Así lo han anunciado la delegada municipal de Cultura, Susana Rivas, y el director del Museo, Jesús Romero. Se trata de un diploma conmemorativo del primer centenario de la Batalla, así como una antigua reproducción fotográfica del monumento a los héroes de este hecho histórico.

El diploma, otorgado por el presidente del Consejo de Ministros en 1915 a Don José Ribal Miramontes, funcionaba como certificado para usar la Medalla de Plata Conmemorativa del Centenario de la Batalla de Chiclana. Esta medalla se concedía para perpetuar la memoria de quienes se emplearon activamente en tan gloriosa jornada. En este caso, el diploma se concedió a un descendiente de un participante directo en la Batalla.

Por su parte, la fotografía reproduce el proyecto del monumento dedicado a los Héroes de la Batalla de Chiclana, ideado en 1900 y en cuya base aparece Anglona. Y es que, en la Batalla, Anglona estuvo al mando del Ejército Central, Laraizábal el de Vanguardia y el británico Graham el de Retaguardia.

A ambas piezas, que vienen a enriquecer los fondos del Museo de la ciudad, Montes Mira adjunta amplia información resultante de su trabajo de investigación. No en vano, una parte de la misma tiene a Chiclana por objeto de quien, con segunda residencia en La Barrosa pasa en la ciudad frecuentes periodos desde hace años.



Durante la presentación de ambas piezas, Susana Rivas ha agradecido ambas donaciones a Manuel Montes, “porque estas piezas pasan a formar parte de los fondos del Museo y porque ha coincidido con la conmemoración del 211 aniversario de la Batalla de la Barrosa”. Además, ha recordado que esta donación no es un hecho aislado, puesto que “Manuel Montes es una persona que tiene presencia y relevancia en el Museo de Chiclana, porque nos está haciendo llegar una parte importante de la historia museográfica de Chiclana”.

Por su parte, Jesús Romero ha explicado que “Manuel Montes lleva varios años donándonos piezas, la primera de ellas de García Gutiérrez. Desde entonces, siempre ha tenido detalles con el Museo, porque es un apasionado de Chiclana y de su historia, por lo que no deja de investigar e indagar. Tanto es así que la última exposición de este año es sobre varios trabajos suyos. Es un personas que nos dona piezas, pero también información que pone en nuestras manos para que podamos seguir trabajando”.