Los 404 litros por metro cuadrado registrados en la localidad en lo que va de año sitúan este primer trimestre de 2018 (hasta el día de hoy) como el más lluvioso de los últimos ocho años, según los datos de la estación agroclimática de la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, que se ubica entre los términos municipales de Chiclana y Conil. Así, hay que remontarse a 2010, cuando se registraron 730 litros por metro cuadrado en un periodo igual, para encontrar una cantidad mayor de precipitaciones; mientras que este mismo periodo de 2017 registró un total de 145 litros por metro cuadrado, es decir, menos de una tercera parte respecto al presente año.
En este sentido, el delegado municipal de Medio Ambiente, Joaquín Páez, indica que “es cuanto menos destacable que, habiendo tenido unos primeros meses del año tan lluviosos, no se hayan constatado incidencias destacables en el municipio, excepción hecha de los temporales en el litoral que han afectado a la arena, contra los que no puede haber previsión posible”. “Así, pese a las intensas precipitaciones, sobre todo, desde finales de febrero, apenas se han producido incidencias destacables en Chiclana en cuanto a posibles inundaciones”, indica.
“La normalidad que ha presidido este periodo de lluvias se basa en dos hechos principales. Así, por un lado, y por lo que respecta a las redes existentes, el sistemático y sectorizado servicio de mantenimiento del saneamiento del casco urbano ha posibilitado que las mismas se encuentren en un satisfactorio estado de funcionamiento; y, por otro, en lo que respecta al extrarradio, los planes de choque puestos en marcha para la limpieza de cunetas, cauces y arroyos han contribuido enormemente a mejorar las condiciones de seguridad en muchas zonas problemáticas del municipio”, expresa Joaquín Páez, quien añade que “estamos satisfechos con el trabajo que se ha llevado a cabo de prevención y que ha posibilidad esta normalidad en el municipio”..
Mención especial merecen las actuaciones de limpieza en elementos de la redes como rejillas, areneros y arquetas. En este sentido, el responsable del área recuerda que “en 2017 se limpiaron 8.534 imbornales y 41 rejillas, atendiéndose además 33 partes de trabajo. De esta forma, fruto de las tareas de limpieza fue la extracción de 22.100 kilogramos de residuos de forma manual”. “Así, pese a lo que ha llovido en las últimas semanas, la red de pluviales del municipio ha aguantado perfectamente absorbiendo el agua que ha caído”, recalca.
Hay que destacar que en estos tres primeros meses de 2018 ha llovido más que en años completos como 2017, 2015, 2014 o 2013. De hecho en 2017 sólo registraron 145 litros en el mismo periodo, y 263 en el año completo. “Antes de que las lluvias pudiesen causar problemas, se limpiaron cunetas y márgenes de amplias zonas de Chiclana como Pinar de los Franceses, El Marquesado, Pago del Humo, camino de La Boyal, camino de Cádiz, caño de Juan Cebada, camino Pozo de Juncal, Llanos de San Vicente, camino de Fuente Amarga, carretera de Carabineros, callejón del Águila, Roda La Bota, callejón de La Pedrera, entre otros”, explica Páez, quien añade que “así el agua no ha inundado estas vías tan transitadas del extrarradio”.
Asimismo, el delegado municipal de Medio Ambiente indica que, “respecto a cauces y arroyos, también se actuó en caño Miñori, hotel Los Gallos, Pago del Humo, cuneta en glorieta de Sancti Petri, caños en Los Gallos-Mogarizas, caño Romeral, cunetas San Andrés Golf, cuneta trasera de Vipren, caño Tejarejo alto, cuneta Cuartillos del Toril, caño Juan Cebada, descansadero de La Boyal y carriles perpendiculares a Cañada de Los Barrancos”. “Por si fuera poco, posteriormente se ha realizado el mantenimiento en otras zonas, con un resultado igualmente satisfactorio”, aclara.