La organización agraria Asaja Córdoba ha presentado alegaciones al Plan Estratégico de la Política Agraria Común (Pepac) para España debido a que, entre otras cuestiones "no ha habido negociación alguna, ni información suficiente, sino solo imposición".
En este sentido y en una nota, el presidente de Asaja Córdoba, Ignacio Fernández de Mesa, ha explicado que, además, "tal y como anunció el propio ministerio, se envió a finales de 2021 a la Comisión Europea su propuesta del Pepac cuando aún tenía abierto el mismo a exposición pública hasta el 4 de febrero", lo que implica que "dudemos seriamente sobre la legalidad y verdadera voluntad de atender este período de alegaciones".
No obstante, Asaja ha presentado sus consideraciones destacando que "los agricultores y ganaderos cordobeses y andaluces han sido quienes han generado el presupuesto PAC que actualmente reciben". Ello, gracias a la diversidad de la agricultura y ganadería cordobesa y andaluza y a su capacidad de adaptación a los continuos cambios de la Política Agrícola Común cada vez que se ha planteado una reforma de esta.
De este modo, "es tremendamente injusto que el modelo presentado por el ministerio en el Pepac los penalice, lo que supone un claro agravio para los agricultores y ganaderos cordobeses y andaluces, especialmente en lo que se refiere al modelo y número de regiones de la ayuda básica a la renta y los tipos de superficies agroecológicas para los eco-regímenes".
Asaja pide que se reconozca que una parte muy importante del presupuesto para la PAC en España es fruto del trabajo de los agricultores y los ganaderos andaluces, "cuestión que no sólo no hace el Ministerio de Agricultura, si no que penaliza por ello de forma injusta".
En su plan, "el ministerio ha propuesto reducir las regiones de la PAC de 50 a 20", lo cual es "muy perjudicial para Córdoba y Andalucía, pues no respeta los equilibrios territoriales y sectoriales actuales, plenamente justificados por las diferencias agronómicas y socioeconómicas, lo que supondrá una notable reducción de la ayuda básica a la renta que reciben las explotaciones". Para Fernández de Mesa, "deberían mantenerse las 50 regiones que actualmente existen para el Pago Básico".
En cuanto a la ayuda complementaria a la renta redistributiva, Asaja está en contra "porque reduce los importes de la renta básica generados por los agricultores y ganaderos de las explotaciones más profesionales y competitivas".
Asimismo, la propuesta de ecoesquemas recogida en el Plan Estratégico Nacional supone "una clara pérdida de renta para el campo andaluz". Las regiones para los ecoesquemas deben ser las mismas regiones productivas PAC que consideran factores agronómicos y la estructura de las explotaciones, "lo que influye de forma decisiva en el cálculo de los costes adicionales y lucros cesantes", ha afirmado.
Además, debe permitirse cobrar más de un ecoesquema por hectárea, y "éstos deben ser viables y realistas porque no lo son". Por otro lado, Asaja considera que solo deben acogerse a los mismos quienes tengan derechos de la PAC.
AGRICULTOR ACTIVO
Finalmente, en referencia al concepto de agricultor activo, Asaja propone "incluir una cláusula de reversión a la lista negativa como existe en la actualidad, que permita salir de ella a todos aquellos agricultores y ganaderos que demuestren que asumen el riesgo empresarial de la explotación".
También, sugiere que para determinar si el 25 por ciento o más de los ingresos totales del agricultor proceden de la actividad agraria, deben tenerse en cuenta los tres periodos impositivos anteriores, "como sucede en la actualidad, y no solo el periodo impositivo disponible más reciente como propone el Pepac a partir de 2023".
Por último, Asaja "no está de acuerdo" en que se haya propuesto un "límite de 200.000 de euros de Ayuda a la Renta Básica independientemente del empleo generado", ya que "ni siquiera se plantea en los reglamentos europeos y que, por supuesto, tampoco ha propuesto ningún país de nuestro entorno ni de nuestras características", ha apostillado Fernández de Mesa.