El Córdoba CF acaricia el ascenso a Primera RFEF a falta de siete jornadas para el final de Liga. El conjunto blanquiverde está a dos victorias de ser equipo de la tercera categoría nacional la próxima temporada y lo tiene en su mano. Los califales dependen de sí mismos para, en los dos próximos partidos, alcanzar su objetivo.
La primera final será este domingo, a las 17:30 horas, en el Príncipe Felipe ante el Cacereño, el segundo mejor local del grupo IV (tras el Córdoba, obviamente). El partido cobra vital importancia porque de ganarlo el Córdoba su ventaja en el liderato subiría a los 15 puntos con 18 en juego.
Tres jugadores están apercibidos de sanción y deberán ir con precaución si no quieren perderse la final del día 9 ante el Villanovense en El Arcángel. Son los casos de Toni Arranz, Luismi Redondo y Antonio Casas.
El árbitro del Cacereño – Córdoba será el leonés Eder Mallo Fernández. Colegiado que pitó el Villanovense – Córdoba de la jornada 12, único partido junto al de la Copa del Rey ante el Sevilla FC que los blanquiverdes han perdido esta temporada.