La Comisión de Patrimonio de la Delegación de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía ha informado favorablemente acerca del proyecto básico de reforma interior del palacio del Castillo de Almodóvar.
La restauración que se hizo de este enclave en el primer tercio del siglo XX, dirigida por el arquitecto Adolfo Fernández Casanova, incluyó la construcción de algunos edificios de nueva planta para hacer más habitable la fortaleza, como la biblioteca y la capilla, según ha recogido la Junta en un comunicado.
Uno de estos edificios es el palacio, una vivienda de estilo neogótico que se levanta al suroeste del Patio de Armas. La reforma afecta únicamente al interior de la planta baja, por lo que tendrá una incidencia limitada en el conjunto del castillo. Se trata de una redistribución funcional que respeta la estructura del edificio y que contempla la renovación de instalaciones, revestimientos, carpinterías y acabados.
El Castillo de Almodóvar tiene la consideración de Bien de Interés Cultural por la Ley de Patrimonio Histórico Español y está inscrito en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz. Tiene un entorno de protección constituido por las parcelas y espacios que lo circunden hasta la distancia de 200 metros en suelo no urbanizable. Está catalogado en el Plan General de Ordenación Urbanística de Almodóvar del Río, con nivel de protección integral.
CASTILLO DE ALMODÓVAR
La fortaleza se construyó en época musulmana. En el año 1240, durante el reinado de Fernando III, pasó a manos cristianas. Posteriormente, durante los reinados de Pedro I y Enrique II, fue convertida en residencia real. Más tarde pasó a la Orden de Calatrava y luego a la de Santiago.
Se trata de un recinto amurallado que se adapta al terreno irregular y que está dividido en dos espacios. La torre del homenaje es una torre albarrana, separada del recinto amurallado y unida a éste por un arco de medio punto. En el ángulo sureste del muro este se encuentra la puerta principal, que da paso a un camino interior definido por torres con garitas y puertas. El paso hacia el recinto interior lleva directamente a la Plaza de Armas.
El acceso al castillo se hace por un arco apuntado de herradura, seguido de un vestíbulo cuadrangular. Las murallas del costado este son romanas en su cuerpo inferior y bajo medievales en la parte alta, están apoyadas sobre rocas y protegidas por la torre del homenaje, unido al resto de la edificación por un viaducto alto. Al suroeste del castillo, y en las estribaciones hacia la vega, se encuentran los restos de una gran villa romana, fragmentos de mosaicos, restos de un aljibe y cerámicas romanas en superficie.