La Diócesis de Córdoba ha incorporado a siete nuevos sacerdotes: Pablo Fernández, Isaac González, Narcisse Kouame, Bernard Huaman, José Antonio Valls, Guillermo Padilla y Fernando Suárez, en un acto presidido por el obispo, Demetrio Fernández.
El prelado, durante su homilía, ha animado a los nuevos sacerdotes a identificarse con Jesucristo en la eucaristía. "Él os irá configurando cada vez más y os pide que le entreguéis vuestra vida entera", ha dicho.
Demetrio Fernández les ha pedido también que acompañen "a los enfermos, a los ancianos y a los pobres: llevadles el consuelo de Dios". "Soñad despiertos y pensad en las personas que se beneficiarán de vuestro sacerdocio", ha alentado el prelado.
"Hoy el corazón de Cristo nos regala siete nuevos presbíteros a la Diócesis y a la Iglesia universal, es un año de especial fecundidad gracias a las oraciones de todos", ha enfatizado el obispo.
Los candidatos han estado acompañados por los rectores y formadores de los dos seminarios, el Seminario Conciliar San Pelagio y el Seminario Diocesano Misionero Redemptoris Mater San Juan de Ávila; así como por sus compañeros, buena parte del clero cordobés, sus familiares y amigos.
Ha estado presente también Aurelio García Macías, nombrado recientemente por el Papa Francisco subsecretario de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos.
Durante el rito de ordenación los siete candidatos se han postrado en el altar y ha tenido lugar el canto de las Letanías; a continuación, el obispo y todos los presbíteros que han concelebrado les han impuesto las manos. Posteriormente se les ha colocado la estola y la casulla; han seguido con la unción de las manos con el Santo Crisma y han terminado con la entrega de la patena y del cáliz.