Fue el pasado mes de marzo cuando la Infanta Elena abandonaba su exclusivo piso cercano al Parque del Retiro para instalarse en una señorial residencia en el madrileño barrio de Almagro. A pesar de que en un primer momento se especuló con que la hija de los Reyes Eméritos habría decidido cambiar su enorme casa de 500 metros cuadrados por una más pequeña y más cerca de su trabajo en la Fundación Mapfre, pronto supimos que el motivo de su inesperada mudanza era otro bien distinto. Y es que su hogar, en la exclusiva zona del Niño Jesús, necesitaba reformas a causa de unas humedades que habrían levantado parte del parquet. Aprovechando este contratiempo, Doña Elena decidía 'liarse la manta a la cabeza' y remodelar su piso, en el que se instaló en el año 2008. Una casa situada en uno de los edificios más representativos de la zona de Retiro, con cinco dormitorios, cuatro cuartos de baño, salón, comedor y zona de servicio, valorada en 1.800.000 euros, que decidió remodelar por completo a finales de 2021, aunque finalmente las obras no comenzaron hasta el pasado mes de marzo.
Una exhaustiva reforma que ha durado 8 meses y que por fin está terminada, por lo que la hermana de Felipe VI ya ha realizado la mudanza. Una empresa especializada se ha encargado de transportar todos sus enseres personales desde la casa en la que ha vivido gran parte de este 2022 hasta su hogar, al que Doña Elena estaba deseando volver.
Numerosas cajas, muebles, un colchón, una nevera, una maleta naranja con el nombre de Victoria - por lo que se supone que pertenece a Victoria Federica, que volvió a vivir con su madre tras su ruptura con Jorge Bárcenas - e incluso la cama de su perrito, que operarios de una conocida empresa de mudanzas han trasladado diligentemente en varios camiones hasta la residencia de la Duquesa de Lugo en el barrio del Niño Jesús. Allí, les hemos visto introducir las pertenencias de la Infanta Elena por la ventana de su domicilio con ayuda de un elevador grúa.
Una mudanza que la hija de Don Juan Carlos ha supervisado personalmente aunque, fiel a su discreción, ha evitado dejarse ver durante el traslado de todas sus pertenencias del piso de Almagro en el que ha residido en los últimos 8 meses, hasta su hogar, cuyas faraónicas obras de reforma por fin han terminado.
