Una vez más las aguas vuelven a revolverse en el interior del club verdiblanco. El episodio renovaciones de los jugadores que terminan contrato a final de temporada se está convirtiendo en un auténtico culebrón Y el último caso es el de Alejandro Pozuelo, donde el cántaro definitivamente se ha roto.
El desacuerdo en las pretensiones de los agentes del futbolista y el Betis es total y ni corto ni perezoso, el joven sevillano ha decidido acudir al Centro de Mediación, Arbitraje y Conciliación (CMAC) para interponer una demanda una demanda de conciliación contra la institución bética según ha informado Diario de Sevilla.
La relación contractual del canterano expira el próximo 30 de junio y la directiva bética entiende que tiene la potestad de ampliarlo dos años más; algo contrario a lo que piensan los representantes de Pozuelo, de la agencia Promoesport, interpretando que la cláusula de renovación es abusiva y va en contra de los derechos del trabajador.
Algo que en su día, cuando se rubricó el acuerdo entre ambas partes, se pactó satisfactoriamente la ampliación de estas dos campañas más e incluso una mejora económica de los emolumentos del propio jugador.
El club por otro lado, no quiere crear agravios comparativos con otros futbolistas criados en las categorías inferiores como Vilarchao o Vadillo. Parece que en toda esta historia, Pozuelo puede tener ya algo atado con otro equipo. La disputa tiene para rato.
Muñiz Fernández no teme a la ‘nevera’
La polémica actuación del colegiado asturiano el pasado sábado en Mestalla sigue coleando tanto en el club como en la afición verdiblanca; aunque tal hecho no parece haber afectado; al menos de cara al público en general, a César Muñiz Fernández.
En este sentido, el árbitro se ha manifestado (cosa que no suele ser habitual en el gremio) en unas declaraciones donde afirme, tener la conciencia muy tranquila tras el manido encuentro: “No tengo permiso para comentar las jugadas de los partidos, pero puedo asegurar que estoy muy tranquilo. No sé lo que ha salido en televisión, pero tengo claro que voy a continuar con mi ritmo habitual de entrenamientos a la espera de dirigir próximos partidos”, ha dicho en ABC.