El extra de motivación que proporciona el ganarle a todo un Barcelona cuando tú no pasas por tu mejor momento reúne tantos intangibles como inyecciones necesarias de calma y tranquilidad ante un parón liguero que podría haberse complicado y mucho con sólo cinco puntos en el haber.
Más allá de los aspectos positivos, que son muchos, estas dos semanas deben ser más que útiles para enmendar errores y corregirlos, como el propio Emery vaticinaba después del encuentro ante los culés. El primero y el que más viene castigando al equipo es el del plano defensivo. La zaga no anda fina y así lo ratifican unos números muy pobres que reflejan la situación deportiva actual de este Sevilla.
Y es que los nervionenses son el tercer equipo de Europa que más disparos recibe, además es el que más lo permite en la Liga, según datos que apunta
El Desmarque. Ello conlleva que los de Emery hayan recibido once goles en estas siete jornadas disputadas, el cuarto que más encaja del campeonato.
Cifras que en poco o casi nada se parecen a la de meses anteriores, aunque tampoco hay que olvidarse de la plaga de lesionados que sufre el conjunto sevillista. Y es que tres centrales, de los teóricamente titulares, apenas han podido participar de este arranque. Eso sí, Rami podría hacerlo una vez concluya este parón. A otro, como es Carriço, se le espera para finales de este mes de octubre.
Aquí también hay que incluir al portero, al portugués Beto, lesionado por dos meses. Aunque el debate de la portería quizás tenga otro recorrido.