Tres derrotas sucesivas por segunda vez durante esta campaña, han provocado que en el Betis se encienda la alerta naranja, calendario y clasificación en mano, después de la caída del equipo en las últimas semanas.
Perder contra el Atlético de Madrid en el Vicente Calderón entra dentro de las probabilidades con índices altos de poder producirse. Sin embargo, eso no quita que para los verdiblancos, haya supuesto un duro mazazo por la forma en que se llevó a cabo.
Sin duda, junto al encuentro en el Sánchez Pizjuán de Copa frente al eterno rival de la ciudad, el cuadro de Merino firmó su peor partido de la temporada; pues más allá de la goleada, la desidia en muchos momentos del bloque de La Palmera, puso en la rueda de prensa posterior al choque de manifesto, el enorme enfado del actual técnico bético.
No obstante, la jornada no ha sido tan negativa como podría haber ocurrido; si bien la cómoda ventaja de seis puntos con el descenso que ostentaba el Betis hasta esta pasada jornada, puede verse reducida en cinco, después del empate del Granada en San Mamés y a la espera de lo que pase en el Levante-Sporting de esta noche.
Una diferencia que podría no ser suficiente echando un vistazo a los restantes enfrentamientos que deberá afrontar el cuadro bético.