"No hay excusas, jugué muy mal", declaró Doncic a los periodistas tras concluir el partido disputado en el American Airlines Center de Dallas
El base esloveno Luka Doncic volvió a ser una jornada más el protagonista en el juego de los Mavericks de Dallas aunque esta vez fue porque no tuvo su mejor actuación individual ni tampoco el equipo pudo evitar la derrota como local por 114-129 ante Los Angeles Lakers, líderes de la Conferencia Oeste.
Además de perder también el duelo individual con el alero estrella, el veterano LeBron James.
"No hay excusas, jugué muy mal", declaró Doncic a los periodistas tras concluir el partido disputado en el American Airlines Center de Dallas.
A pesar que el exjugador del Real Madrid volvió a ser el líder de los Mavericks con un doble-doble de 25 puntos, 10 rebotes y siete asistencias, nunca pudo ser decisivo.
El pobre control del balón que tuvo durante todo el partido le hizo perder seis balones que los Lakers aprovecharon al máximo para convertirlos en canastas.
"Fue algo raro, sentía que no sabía cómo jugar baloncesto. Tengo que mejorar mucho", reconoció Doncic, que vio cómo su equipo perdía el segundo partido consecutivo y el quinto en los últimos siete que ha disputado.
La ausencia del ala-pívot letón Kristaps Porzingis, que se perdió el cuarto partido seguido por molestias en la rodilla derecha, confirmó que perjudica el rendimiento y la eficacia del juego colectivo de Doncic, que ante los Lakers mostró falta de confianza con algunos compañeros.
Doncic también sufría al ver cómo James, su gran ídolo de infancia, daba todo un recital y exhibición de buen juego para conseguir por primera vez en su carrera un doble-doble con al menos 35 puntos y 15 rebotes -acabó con 16-, además de aportar siete asistencias.
La imagen más reveladora de la frustración de Doncic fue verlo en la primera parte cuando después de haber fallado dos tiros de personal, mientras regresaba a defender se agarró con fuerza la camiseta por la parte del pecho hasta que la rasgó y dejó un roto en forma de "V".
Doncic pasó gran parte de la primera mitad con los hombros caídos y la cabeza baja, mientras los Lakers lideraban el marcador con 22 puntos de ventaja y la concluían con 79 puntos la mejor marca de la temporada para cualquier mitad de partido.
El exjugador del Real Madrid ha admitido que a veces permite que sus emociones afecten negativamente su rendimiento en el campo. Ese parecía ser el caso en la primera mitad del duelo ante los Lakers cuando Doncic cometió cinco pérdidas de balón y perdió cinco tiros libres y los Mavs fueron superados por 24 puntos en sus 16 minutos.
Doncic, de 20 años, un probable titular en la 69 edición del Partido de las Estrellas en su segunda temporada en la NBA, reconoció que una de las áreas que necesita mejorar es cómo lidia con su frustración en la pista de juego.
"Soy competitivo y, como digo, tengo que mejorar en muchos puntos. Ser mucho mejor", reiteró Doncic. "Sé que puedo mejorar. Hay muchas cosas. Tengo 20 años. Tengo muchas cosas que puedo hacer mejor, puedo aprender más. Así que mejoraré".
Doncic lo hizo mejor en la segunda parte con nueva camiseta y tras disputar 32 minutos anotó 8 de 19 tiros campo, pero sólo uno de cinco intentos desde fuera del perímetro y 8 de 13 de personal.
Su reacción y recuperación de la compostura emocional al final no pudo evitar la derrota de los Mavericks ni tampoco que James le robase el protagonismo como superestrella y "King" indiscutible de la NBA.