Lo busca y se lo recuerdan: “este va a ser el año de Germán”. No será por intentos. Nueva reivindicación que halló la magia y todo el sentimiento al Cartero Real. Una de cal y una de arena con la segunda letra y al silencio y la falta de reivindicación social del gaditano.
La lengua más crítica para un “Cádiz hecha para viejos”. Juego de intenciones en los que la sesión guarda lo mejor de sí para el final. Una pena. Y todo con una diversidad de instrumento que sirvió para entonar un estilo y un gusto para sellar un pase que se esfumó.
Argumentos para la primera ovación con un público de pie y entregado a la causa.