Continúa la confrontación entre agentes de la UPBLA y el Ayuntamiento. Esta vez con el uso del cepo en los vehículos municipales sin asegurar como herramienta de presión mediática contra el Gobierno local. Fuentes de la Policía confirman que el uso del cepo se habría utilizado para "llamar la atención e importunar al Gobierno" aprovechando la negligencia del abono de las facturas pendientes por parte del Ayuntamiento.
Según ha podido conocer este medio, "el uso del cepo no es obligatorio, bastaría solo con adherir una pegatina que especifica que el vehículo está inmovilizado. De circular el vehículo con la pegatina, estaríamos hablando de un delito".
Cabe recordar que desde el martes, la Policía Local junto al servicio de grúa inmovilizó 30 vehículos municipales de los 87 que se encontraban sin asegurar (entre ellos, dos vehículos de alcaldía). La multa para el Ayuntamiento ascendería a más de 12.000 euros.
