La Celestina, la archiconocida obra de Fernando de Rojas, se traslada en esta ocasión al teatro para contarnos, una vez más, y a través de su escenografía y caracterización la historia de Calixto y Melibea.
Además, con un aliciente más. Y es que la representación, que podrá verse en el teatro municipal Pedro Muñoz Seca este sábado a partir de las 21.00 horas, está dirigida por Ricardo Iniesta, e interpretada por el grupo de teatro Atalaya, que cuenta con un Premio Nacional de Teatro.
La Celestina es un fiel reflejo del cambio que se produjo en las letras españolas con el paso de la Edad Media al Renacimiento. Asimismo, la obra muestra a la perfección como la sociedad pícara de la época utiliza todo tipo de ingenios para conseguir su objetivo. Circunstancia que, pensándolo bien, se asemeja mucho a la que actualmente estamos viviendo en nuestra realidad. En este sentido, podría destacar la importancia del dinero, las nuevas relaciones sociales que se establecen y el trato que se ofrece a la mujer.
Igualmente, esta representación, que recupera a la recupera a la actriz Carmen Gallardo para el personaje de la vieja alcahueta, pone de manifiesto con su montaje la tremenda modernidad del trabajo de Rojas. Así, recrea un tiempo en el que se resquebraja el mundo medieval, en lo referente a la religión, ya que la sociedad anterior creía en una ordenación creada por Dios.
Otro de los aspectos que llama la atención del trabajo de Atalaya es que quizá sea el más elaborado y ambicioso en cuanto al aspecto artístico. Aquí, lo grotesco, la crueldad, la magia o el rito marcan el tono de la puesta en escena. Además, el grupo de teatro consolida con la obra de Fernando de Rojas el lenguaje oral y el dominio de la técnica de la palabra poética.
Algunas de las críticas teatrales han dicho que está llena “de emociones y buenos discursos, aún mejores interpretaciones, el nuevo montaje de Atalaya es el culmen de una trayectoria de casi treinta años. Si el original seduce, aquí se aprecia aún más. Atrapa las entrañas y desarma al más pintado”.
Del mismo modo, habría que hacer hincapié en la importancia de Atalaya, uno de los grupos de teatro españoles con mayor repercusión fuera de nuestras fronteras. Este éxito se basa en la enorme calidad y rigor de su trabajo, pero también en la universalidad de sus propuestas en lo a que textos y autores se refiere.
