Después del 2 de diciembre, casi todo lo que ha ocurrido en el ámbito político en Andalucía ha seguido un guión perfectamente diseñado. Nada se ha salido de él, ni los amagos. Desde los tiras y afloja en la negociación del PP y Cs, las dudas de Vox, o la amenaza de la repetición de las elecciones, a la investidura del presidente para la XI Legislatura, que por vez primera en la historia de la autonomía no será del partido del puño y la rosa.
Juanma Moreno, líder andaluz del PP, se convirtió este miércoles, al filo de las 5 de la tarde, en el séptimo presidente de la Junta de Andalucía, después de Plácido Fernández Viagas (que lo fue en la etapa preautonómica, entre 1978 y 1979), Rafael Escuredo (1979-1984), que inauguró el periodo autonómico propiamente dicho, José Rodríguez de la Borbolla (1984-1990), Manuel Chaves (1990-2009), José Antonio Griñán (2009-2013) y Susana Díaz (2013-2019). Y lo hizo en primera votación, al obtener la mayoría absoluta gracias a los votos del PP, Cs y Vox. 59 votos a favor y sólo 50 en contra, los del PSOE y Adelante Andalucía.
El martes pronunció su discurso de investidura, en el que ofreció su mano tendida a todos los grupos políticos representados en el Parlamento. Y este miércoles era el turno de éstos para responder a su ofrecimiento. El portavoz de Vox, Francisco Serrano, abrió el turno de intervenciones, al ser el suyo el grupo político con menos diputados. Sólo 12, aunque por momentos, en el tiempo transcurrido desde las elecciones, han parecido muchos más.
Serrano se estrenó en el estrado del antiguo Hospital de las Cinco Llagas reivindicando el papel decisivo de Vox a la hora de propiciar el cambio de Gobierno en Andalucía, "tras 36 años de gobiernos socialistas". En su intervención mantuvo cierto tono de victimismo, como si se defendiera de unos ataques que, precisamente, Juanma Moreno no ha protagonizado contra su formación.
"Somos el partido que ha venido a ocupar el vacío existencial político que ofrece el actual marco parlamentario. Somos", dijo, "un partido de extremo sentido común". Su intervención fue muy dura contra la izquierda. Reprochó al PSOE el "conformismo" que ha demostrado en estos últimos 36 años (y al PP su "derrotismo"). Y criticó la "dictadura de una izquierda inclusiva" y la Ley de la Memoria Histórica, "fruto del rencor de nuevos fascistas disfrazados de demócratas".
Por último, Serrano prometió a Moreno una oposición "firme, responsable y leal con nuestros 400.000 votantes y acorde con nuestros planteamientos ideológicos", y se mostró dispuesto a pelear, en este sentido, por la "derogación de las leyes de ideología de género. No les vamos a defraudar". También envió un mensaje a Juan Marín, el líder de Cs y en unos días vicepresidente del Gobierno de Juanma Moreno: "Sólo nos conocen por referencias".
El discurso de Teresa Rodríguez, portavoz en esta ocasión de la confluencia Adelante Andalucía, fue el más duro de los que este martes escuchó Juanma Moreno. Arrancó su intervención anunciando su "no" a la investidura del candidato del PP. Por cuatro motivos, dijo. Por ser "un Gobierno de franquicia que pone en riesgo la autonomía, por ser un Gobierno de los ricos, por ser de corbatas muy grandes en corazones muy pequeños, entregados como están a la extrema derecha, y porque no son cambio, sino de reacción", aseguró Rodríguez.
La portavoz de Adelante Andalucía, que tuvo que abandonar la Cámara tras su intervención al sentirse indispuesta y hubo de delegar su voto para la votación de la tarde, acusó a Moreno hacer un "Gobierno para los ricos, los bancos, los constructores, la industria farmacéutica, los terratenientes...", y se preguntó de forma retórica "¿quién viene a quitarnos las ayudas sociales, los inmigrantes o los bancos, las mujeres o los corruptos?".
Juan Marín, de Cs, se limitó durante su intervención a defender la necesidad de cambio y a dejarle muy claro a Juanma Moreno y al resto de la Cámara, que el su partido sólo se siente obligado por los acuerdos firmados exclusivamente por el PP y Cs. "El compromiso nos obliga a usted y a mí, señor Moreno. Y respeto que usted tenga que llegar a un acuerdo con otras fuerzas, sean las que sean, para lograr su investidura".
La intervención de la presidenta en funciones, Susana Díaz (Moreno no tomará posesión de su cargo hasta el viernes), era con toda probabilidad la más esperada. Y fue tan dura como esperada. Díaz criticó el "paralelismo" que Moreno estableció en su discurso de investidura "entre un cambio de Gobierno normal, dentro de un sistema democrático consolidado, con la Transición política" y le reprochó hasta las referencias al presidente del Gobierno de aquel momento.
"Apeló por dos veces a Adolfo Suárez, que enterró el franquismo, y usted va a ser ahora presidente de la Junta con los herederos del franquismo", dijo Díaz. También puso en cuestión la asimilación que Juanma Moreno hizo de la democracia con la alternancia. "Ni la democracia es cambio, ni la alternancia la esencia de la democracia", dijo. "Es consecuencia de las libertades", apuntó, y aseguró que "el PSOE será un dique de contención para la involución, los recortes y los retrocesos", tras manifestar sus dudas en torno a "un gobierno en minoría en el que el vicepresidente dice desconocer lo que pacta el presidente”, en referencia al acuerdo con Vox.
Las perlas del debate
El debate de investidura ha estado plagado de perlas dialécticas por parte de todos los portavoces. El de Vox, Francisco Serrano, aseguró que los planteamientos de su partido se inspiran en "un revolucionario de hace más de 2.000 años que basaba su ideología en el amor", y citó el Evangelio de Juan. Antes, había acusado a la izquierda, en general, de ser "Dorian Grey, y el retrato que dicen odiar es el de los españoles y andaluces que dicen defender".
Teresa Rodríguez, la portavoz de Adelante Andalucía, se refirió en varias ocasiones a Santiago Abascal, presidente de Vox y presente en el Parlamento, como "el niño de las pistolas". Además, reprochó a Juanma Moreno que le rebatiera su intervención aludiendo al chalé de Pablo Iglesias. "Será que no tiene argumentos. Le invito a tomar café en mi piso de 40 metros en el barrio de la Viña".
Juan Marín, el candidato de Cs, quizá fue el más comedido. Señaló, no obstante, que "cuarenta años son muchos, yo diría que demasiados", antes de asegurar que en Andalucía "somos campeones de España y de Europa de paro".
La presidenta de la Junta en funciones, Susana Díaz, ayer en el papel de portavoz socialista y de toda la vida declarada creyente, respondió al de Vox asegurando que "nunca escuché a Cristo decir deportaos los unos a los otros, como yo os he deportado", y preguntó, cual Jennifer López, a Juanma Moreno, "¿los 600.000 pa cuándo?".
Susana Díaz, dirigiéndose a Ciudadanos, tiró de dicho popular parafraseado por el grupo Objetivo Birmania en una de sus canciones, para recordarle que "los amigos de mis amigos son mis amigos", en referencia al pacto del PP, su socio en el nuevo Gobierno, con Vox. Y Juanma Moreno aprovechó que el balón le llegó botando para responder: "Usted dice eso de que los amigos de mis amigos son mis amigos... ¿Los amigos del señor Sánchez son sus amigos?", le preguntó.
Moreno había citado a Machado y se había referido a García Lorca en sus intervenciones previas, lo que no le gustó a Díaz. Pero él, lejos de arredrarse, volvió a recurrir a los poetas andaluces: "Resulta curioso oírla hablar de inestabilidad. Y en este punto habría que citar a Bécquer: ¿Y tú me lo preguntas...?".
El calendario
Una vez investido presidente, la decisión será comunicada al presidente del Gobierno y al Rey, que deberá sancionarla mediante un Real Decreto. Será a partir de entonces y una vez publicada la orden en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) cuando Juanma Moreno tome posesión del cargo y forme el Gobierno de la XI Legislatura.
Juanma Moreno tomará posesión del cargo este viernes, 18 de enero, en el Parlamento andaluz, concretamente en el Salón de Usos Múltiples a partir de las 12.00 horas, en un acto que estará presidido por Marta Bosquet, presidenta del Parlamento. Por el momento ya han confirmado que acudirán a la toma de posesión el presidente del PP, Pablo Casado; su antecesor en el cargo y expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y su exvicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría.
Así las cosas, Moreno dará a conocer a su futuro gobierno el próximo lunes, y un día más tarde, el martes, tomará posesión. El flamante presidente ya ha anunciado que el primer Consejo de su Gobierno se celebrará el viernes, 25 de enero, en Antequera (Málaga), coincidiendo con los 40 años de la aprobación del primer Estatuto de Autonomía para Andalucía.