El Puerto ya se prepara para el día después, una vez la normalidad se vaya imponiendo con el paso de los días. A nadie escapa que en la búsqueda de esa rutina, reactivar la economía va a resultar un reto muy a tener en cuenta y en el que, como decimos, una vez se controle la pandemia, el comercio y el turismo deben resurgir y arrancar la maquinaria económica.
Sin actividad económica no hay futuro ni ayudas socialesY todo ello con un verano en puertas y tras haber perdido de forma seguida la Semana Santa y la Motorada, hay tanto en juego que la necesidad obliga a marcar las pautas para recuperar el tiempo perdido. Eventos sin dudas provechosos que han minado los ingresos programados en el comercio local.
Anticiparse a ello debe ser el reto para posicionar a la ciudad como un referente, no solo turístico, sino lo más importante ahora y como mejor reclamo publicitario: ser ante todo seguros. A nadie extraña que esa normalidad no va a ser tan reconocida, vamos a entrar en una etapa por descubrir y muy diferente. Con normas, muchas restricciones y reglas que cumplir.
El post virus está por descubrir pero también, y lo más importante, saber adaptarse a él; en ello estará el éxito. El ciudadano de a pie, con mascarillas y guantes, y el comercio y el hotel, con medidas ajustadas (aún por definir) para los clientes. Una combinación de la que se pretende beneficiar El Puerto.
En esa época pre veraniega y con un turismo en pausa, el turismo de proximidad es el que se va a imponer en las próximas fechas, no habrá otro. Un turista andaluz y como mucho y eso lo marcará las condiciones a las que nos dictará el tiempo y el control del virus, el nacional. Ese es el mercado y el turista medio.
En esa adaptabilidad y a la espera de la espera de conocer esa desescalada programada por el Gobierno, las comunidades autónomas ya han trasladado cada una sus exigencias y sus propuestas particulares. Si bien será determinante en ese desconfinamiento gradual, la situación de control de la pandemia y las necesidades propias de cada zona.
En el caso de Andalucía ya se ha mostrado favorable y necesario el abrir las playas este verano. En ese deseo queda por definir, igualmente, en qué condiciones y cómo vamos a poder acceder a ellas. Si habrá limitaciones y cuales serán.
Que la prevención, la cautela y el seguimiento de las autoridades sanitarias son básicos, no deja de ser menos importante que hay que marcar el paso siguiente. La mejor frase que define los pasos a seguir, es la pronunciada por el alcalde portuense Germán Beardo, “sin actividad económica no hay futuro ni ayudas sociales”.
