Según los últimos datos del Banco de España, la tasa de esfuerzo registrada en 2009 supone volver a niveles que no se registraban desde 2005.
Sin contar la deducción actual (15% de las aportaciones hipotecarias anuales, con un máximo de 9.015 euros), el esfuerzo realizado por las familias para comprar su hogar sube al 35,9%.
Este esfuerzo económico sin deducciones es casi 17% más bajo que cuando se registró la tasa más alta en el tercer trimestre de 2008, momento en el que alcanzó el 52,6%.
Este año será el último para poder beneficiarse de dicho beneficio fiscal, ya que a partir de 2011 esa deducción se limitará a las rentas inferiores a 24.107,20 euros.
De momento y contando las deducciones, las familias que compraron una vivienda en 2009 necesitarán los ingresos brutos de 6,9 años para pagar su piso o casa, frente a los 7,2 años que se necesitaban en 2008.