Al menos dos personas han muerto y 4.000 fueron evacuadas de sus casas por las lluvias torrenciales que padece esta semana la región oriental de Filipinas.
Al menos dos personas han muerto y 4.000 fueron evacuadas de sus casas por las lluvias torrenciales que padece esta semana la región oriental de Filipinas.
Una mujer de 80 años, Lolita Dadap, y su hijo Antonio, de 50, perecieron ahogados el miércoles cuando intentaban alcanzar un refugio en la provincia de Albay, unos 350 kilómetros al sureste de Manila, señaló el gobernador, Joey Salceda.
“Les evacuamos por la mañana pero parece que intentaron regresar a su casa a recoger objetos personales. Al volver al centro de evacuación quedaron atrapados por una riada”, dijo Salceda.
El gobernador declaró el estado de calamidad en la provincia ante las inundaciones y corrimientos de tierras.