El cabecilla de la organización, J. T. M, un vecino de Dos Hermanas propietario de varias empresas de transportes en la provincia, utilizaba los vehículos pesados para mover la mercancía ilegal, camuflada entre hortalizas.
Tras una información obtenida de una operación anterior, la Guardia Civil puso en marcha la llamada Operación Tentáculos. Primero, los agentes inspeccionaron en el Puerto de Algeciras un remolque procedente de Marruecos que contenía la droga incautada. Tras localizar los 2.500 kilos de hachís, se procedió a la detención de los dos conductores del camión, J. P .S, vecino de Dos Hermanas, y L .D .G, de Morón de la Frontera. Continuando con el operativo, la benemérita localizó una nave situada en Alcalá de Guadaíra, donde se descargaba la droga. La operación finalizó con dos registros domiciliarios, seis vehículos incautados y cuatro detenidos más. Entre los arrestados se encuentran el cabecilla de la organización y su hijo, vecinos de Dos Hermanas, y otros dos miembros de la trama, residentes en Sevilla.
La droga, procedente de Marruecos, se introducía en camiones cargados de tomates y calabacines. Entre los palés se incluían otros, con bolas de hachís que simulaban la forma de los productos transportados. Ya en España, los camioneros llevaban la carga hasta una nave situada en Alcalá de Guadaíra, donde los palés de hachís eran sustituidos por verduras. Tras el cambio, los camiones continuaban con la carga legal hasta su punto de destino, y la droga era transportada a Málaga, para su distribución por otros países europeos.
