Las fuentes añaden que estos enfrentamientos, de una especial virulencia y que continuaban durante las primeras horas de la tarde, se han cobrado también la vida de 15 rebeldes.
La zona donde se desarrollan los combates se caracteriza por los estampidos de las sucesivas explosiones y los intercambios de fuego graneado, explican las fuentes, que citan a uno de los portavoces de los rebeldes que luchan desde febrero para conseguir la caída del régimen de Trípoli.
La ciudad de Zawiyah, situada entre Trípoli y la franja fronteriza con Túnez, estaba hasta ahora controlada por las fuerzas gadafistas, pero los enfrentamientos de las últimas horas parecen haber revertido la situación militar en esa parte del país.
Las fuerzas fieles a Gadafi se han visto obligadas a replegarse y a cortar la carretera que une la capital con la frontera para intentar bloquear eventuales refuerzos rebeldes, indican las mismas fuentes.
Al Jazira afirma, por otra parte, que los revolucionarios han lanzado ataques relámpago contra las fuerzas de Gadafi en la localidad de Riyayna y Zaouiyet El Bakoul, al sudoeste del país, sin que se conozcan aún las consecuencias.
La situación militar, marcada por intensos y violentos combates se ha deteriorado bruscamente desde la intervención por radio del coronel Gadafi, el martes pasado, cuando reafirmó su intención de permanecer en Libia “vivo o muerto”.
La ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, ha invitado a los dirigentes del Consejo Nacional de Transición (CNT), el órgano que agrupa a los rebeldes libios, a que visiten España en las próximas semanas con el fin de reforzar la relación bilateral.
Trinidad Jiménez formalizó la invitación a los dirigentes de la oposición a Muamar el Gadafi durante la visita que hizo a Bengasi, la capital de fact de los insurgentes, el pasado miércoles, según han informado fuentes de Exteriores.
Durante su estancia en Bengasi, la jefa de la diplomacia española proclamó que el CNT es “el representante legítimo del pueblo libio” y al que le corresponde dirigir el proceso de reconciliación en el país una vez que Gadafi sea derrocado.