La dirección federal de IU ha anunciado la apertura de un expediente informativo a sus tres diputados en el Parlamento extremeño que este mismo día han permitido la investidura del candidato del PP, José Antonio Monago, como presidente de la Junta de Extremadura, al abstenerse en la votación, en contra de la postura de la coalición.

Además, ha manifestado "la más rotunda desautorización política" a la decisión de la federación extremeña, en una declaración política enviada a los medios de comunicación poco después de que dicha decisión se materializara.

La Presidencia Federal de IU había pedido expresamente a sus tres diputados en el Parlamento Extremeño que, en lugar de abstenerse, tal y como había aprobado el Consejo Político de Extremadura tras consultar a las bases, votara en contra de Monago.

La decisión es también contraria a los acuerdos aprobados en sendos Consejos Políticos Federales, según los cuales *IU no debe permitir, ni ahora ni en el futuro, que con sus votos, por acción u omisión, gobierne el PP*.

Así, además de la apertura de un expediente informativo a los tres diputados extremeños "con carácter de máxima urgencia", para que estén concluidos antes de la finalización del mes de julio, ha puesto en marcha el mecanismo establecido en el artículo 9 de los estatutos para resolver diferencias entre esta dirección y sus federaciones.

"Una vez que hemos constatado la disparidad de criterios será la Comisión Federal de Arbitraje y Garantías Democráticas quien determine sobre la legalidad estatutaria de la decisión tomada por la dirección extremeña y de las posibles responsabilidades de la misma en una resolución de obligado cumplimiento para las partes", precisa el texto de la declaración.

Igualmente, insiste en que "la dirección de IU Extremadura y sus diputados no representan hoy la política de Izquierda Unida y se sitúan fuera de la misma". Por lo tanto, IU federal "no se responsabiliza de las consecuencias políticas que se deriven, en Extremadura o fuera de dicha Comunidad Autónoma, de la decisión tomada", señala.

Asimismo, reitera que la dirección federal de IU considera "un grave error para Extremadura, con consecuencias para el resto del Estado, la decisión tomada, al quebrar la confianza en la palabra dada a la ciudadanía y al compromiso solemne dado en campaña electoral, principio fundamental para una fuerza política que se reclama de la izquierda transformadora y que pretende ser creíble".