España 45
Cuba 20
—España—
Sierra (Hombrados); Entrerríos (1), Ugalde (7), Rocas (5,1p), Cañellas (1), Garabaya (2), Andreu (1), Morros (1), Perales (2), Juanín (9, 3p), Ruesga (6), Iker Romero (6, 2p), Tomás (4).
—Cuba—
Iglesia (Quintana); Turino (1), Rodríguez, Martí (2), Díaz (2), Fernández, Cuní (2), Echavarría (5), Carol (3), Tomasen (1), Amador (4), Robles y Ríos.
Árbitro:
Nilson y Pinto (Brasil). Excluyeron a Díaz, Carol, Amador (2), Cuní, Turino, Morros, Iker Romero, Rocas y descalificaron (tarjeta roja) a Martí.
Marcador cada 5 minutos:
2-4, 2-8, 5-12, 5-15, 7-20, 24-10 (descanso),
11-26, 12-29, 15-33, 17-35, 18-41, 20-45 (final).
Incidencias:
Segunda jornada, Grupo B, del Campeonato del Mundo de balonmano Croacia 2009. Spaladium Arena de Split (800 espectadores). Descansaron Barrufet y Víctor Hugo.
España liquidó el segundo trámite mundialista frente a Cuba igual que hizo con el primero (Kuwait), con otra contundente victoria (20-45) antes de su verdadero Mundial de balonmano que comenzará hoy con el partido frente a Suecia (18.30 horas, Split).
El encuentro se convirtió muy pronto en una antología del contraataque. En esa faceta los extremos españoles dieron un recital de lanzamientos: en carrera, en salto con caída, rectificados, vaselinas, roscas y a los cuatro ángulos.
Atravesado el ecuador con 24-10 la cuestión se centró en el intento de superar la barrera del medio centenar de goles. La mente de Rivera, de sus técnicos y de parte de la plantilla se liberó para dar rienda suelta a la imaginación balonmanística.
El partido frente al combinado nórdico dará el pistoletazo de salida al auténtico Mundial para los de Rivera. Si España cae derrotada con los suecos, se verá abocada a conseguir una heroicidad: ganar después a Croacia, la anfitriona empujada por 12.000 gargantas enloquecidas.