Manzanares volvió a mostrar un alto nivel pero esta vez sin triunfo y Morante sólo dejó detalles en su última comparecencia en la Feria
López Simón, que tomaba la alternativa esta tarde en la Maestranza sevillana, ha sido el triunfador de la corrida que más expectación ha creado en la Feria al cortar una oreja del toro de la alternativa. No pudo torear al segundo de su lote al sufrir una cornada cuando entraba a matar a su primer toro, teniendo que pasar a la enfermería. Manzanares volvió a mostrar un alto nivel pero esta vez sin triunfo y Morante sólo dejó detalles en su última comparecencia en la Feria.
López Simón vivió la cara y la cruz en el día de su alternativa. Para él fue el mejor toro de los de Núñez del Cuvillo y el toricantano lo aprovechó para cortar una oreja. Sin embargo, fue cogido al entrar a matar y tuvo que pasar a la enfermería. La tarde también deparó una buena actuación de Manzanares, muy por encima de sus dos toros, y tuvo detalles de Morante, sobre todo en el último toro de la corrida.
Se lidiaron toros de Núñez del Cuvillo, el primero sobrero del mismo hierro, bien presentados y de juego desigual. Destacó el primero.
Morante de la Puebla, silencio, pitos y silencio.
José Mari Manzanares, silencio y saludos.
López Simón, que tomaba la alternativa, una oreja tras aviso en el único que mató.
Lleno de 'no hay billetes'.
López Simón vio como el toro de la alternativa era devuelto a corrales por su debilidad. En su lugar salió un sobrero de nombre Juncoso, número 154 de 530 kilos, con el que Morante de la Puebla le dio la alternativa en presencia de Jose Mari Manzanares. Comenzó la faena con dos pases cambiados por la espalda y después echó las dos rodillas a tierra para dar una buena serie por la derecha. Las dos siguientes fueron ligadas y bien rematadas. También la tercera por ese pitón, pero al natural, con el toro más agotado, bajó la intensidad. Terminó con manoletinas y fue cogido al entrar a matar después de dejar una buena estocada. Cortó una oreja y pasó a la enfermería, sin poder salir a matar a su segundo enemigo.
El segundo de la tarde no dejó a Morante torear de capa y en la muleta se dejó lo suficiente para que el torero de La Puebla dibujara algunos muletazos buenos por el lado derecho. La faena no pudo tener continuidad debido a que el toro perdía las manos. Mató de media atravesada y su labor fue silenciada.
Manzanares se lució con el capote en el primero de su lote. En banderillas saludaron Juan José Trujillo y Luis Blázquez. En la primera serie diestra hizo al toro y en la segunda lo llevó más largo, exigiéndole más. En la tercera el toro se reservó más y Manzanares cambió de mano. A esas alturas el de Cuvillo estaba ya agotado y no pudo haber mas lucimiento aunque el torero trató de sacarle todo el partido. Mató de pinchazo y casi entera. Silencio.
El cuarto fue duramente castigado en varas y pronto apreció Morante que no era su toro. En la muleta probó al su enemigo por ambos pitones y abrevió, escuchando pitos como veredicto del público maestrante.
Manzanares puso variedad en el recibo de capa al segundo de su lote, alternando verónicas, chicuelinas, tafalleras y rematando con las dos rodillas en tierra. Hizo un quite por chicuelinas muy ajustado y Curro Javier protagonizó un tercio de banderillas memorable, saludando con su compañero Luis Blázquez. Manzanares comenzó la faena con dos buenas series por el pitón derecho en las que llevó mucho al toro. La tercera fue muy vibrante porque el toro transmitía mucho. Cambió a la zurda y hubo dos buenas series, la segunda ya con el toro más agotado. En el final destacaron un cambio de mano ligado con un molinete excelentes. Pinchazo y estocada desprendida. Ovación.
El sexto lo lidió Morante por la cogida de López Simón. El de La Puebla se reconcilió con la plaza en un quite por chicuelinas rematado con dos buenas medias que fue muy ovacionado. La faena de muleta la comenzó con ayudados por alto rematando con precioso trincherazo con la zurda. En la primera serie un extraño del toro le desconcertó y en la siguiente le tocó demasiado la muleta, de modo que hasta ahí llegó la faena: sólo detalles.