El tiempo en: Aljarafe
Publicidad Ai

España

Chivite propone la abstención del PSN en la investidura de Barkos como muestra de su "voluntad de diálogo"

Advierte de que si "el cambio" va a ser "pagar peajes a Bildu e ir hacia una deriva nacionalista" los socialistas "no acordarán"

Publicidad Ai
Publicidad Ai

La secretaria general del PSN, María Chivite, ha propuesto al Comité Regional del partido que los socialistas se abstengan en el pleno de investidura de Uxue Barkos como nueva presidenta del Gobierno de Navarra como muestra de su "voluntad de diálogo", pero "desde una postura vigilante y sin cheques en blanco".

   Chivite, en su intervención ante el Comité Regional que los socialistas celebran este sábado en Pamplona, ha afirmado que espera que el nuevo Ejecutivo foral "cambie las maneras de hacer política" y que "esté a la altura y no caiga en tentaciones personalistas o imposiciones".

   En su opinión, durante esta legislatura "más que nunca" el diálogo "va a ser fundamental" y a partir de ahora "se va a haber el talante e intenciones del nuevo Gobierno".

   Por todo esto, Chivite ha propuesto que el PSN no se oponga a que Barkos sea la nueva presidenta porque, según ha dicho, el partido "apuesta por el cambio" y "queremos mostrar nuestra voluntad de diálogo".

   "Propongo la abstención, desde una postura vigilante y sin cheques en blanco. Seremos muy exigentes con un gobierno que tendrá que empezar a tomar decisiones", ha subrayado la líder de los socialistas navarros ante el Comité Regional, en el que estaba previsto que los socialistas fijaran su voto sobre la investidura de Barkos, pero al no tener "quorum suficiente", ya que sólo se han inscrito 82 miembros, no se someterá a votación esta cuestión.

   En este sentido, Chivite ha explicado que la posición en la investidura no la tiene por qué tomar el Comité Regional, pero que habían decidido someterlo a votación en este órgano al considerar que "es un buen instrumento para debatir cuál puede ser la postura del partido en este proceso".

EL PSN QUIERE QUE UPN PASE A LA OPOSICIÓN

   En su discurso, la secretaria general del PSN ha querido dejar claro que su partido "sigue manteniendo la voluntad de comenzar un nuevo tiempo en Navarra", después de 25 años de gobiernos de UPN, en los que los regionalistas "han demostrado no estar a la altura de lo que Navarra ha necesitado especialmente en tiempos de crisis". "En democracia la alternancia es positiva, es bueno que en los gobiernos haya relevo", ha sostenido.

   A su entender, en Navarra "se ha perdido una legislatura por la incapacidad de UPN y de la hasta ahora presidenta del Gobierno de acordar, y desde luego de gestionar" y ha considerado que los regionalistas "se han demostrado incapaces de sacar esta comunidad adelante".

   Por eso, ha defendido que "el tiempo de UPN ha terminado" y que "necesitamos que haya un cambio de Gobierno", si bien ha subrayado que el PSN "no está en la línea del cambio por el cambio, y de que se haga cualquier cosa con tal de que UPN deje de gobernar".

   "El PSN quiere que UPN pase a la oposición, sí. Pero también quiere un gobierno solvente, estable, que represente a todos los navarros y que se centre en lo importante, que es la recuperación económica para generar empleo de calidad y avanzar en políticas sociales, en lucha contra la brecha social, y no en asuntos que ni son prioritarios ni interesan a la mayoría como las cuestiones identitarias", ha expuesto.

CRITICA EL "AFÁN POR LA EUSKALDUNIZACIÓN"

   En este sentido, se ha mostrado "preocupada" por el "afán por la eukaldunización que hemos detectado en el acuerdo de gobierno que se ha firmado por los cuatro partidos que lo han negociado (Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e I-E)".

   Y también ha dicho que le "preocupan" actitudes como "la del alcalde de Bildu en Pamplona, de imponer sin consultar a nadie la ikurriña en el balcón del Ayuntamiento, cuando esa bandera no es la bandera de Navarra ni existe una sensibilidad mayoritaria hacia ella".

   Según ha expuesto, "esos detalles son los que vamos a mirar con lupa porque si el cambio para la presidenta Barkos va a ser pagar peajes a Bildu con tal de gobernar, y llevar a Navarra hacia una deriva nacionalista vasca, entonces no vamos a poder acordar".

   No obstante, ha señalado que los socialistas se presentan ante el nuevo Gobierno foral con "la mejor voluntad para el diálogo", siempre que "las prioridades sean el empleo, los servicios públicos y las políticas sociales, pero sin trampas".

   "Si en educación pretenden arrinconar el PAI para anteponer el euskera, con nosotros que no cuenten. Nosotros decimos que el euskera hay que respetarlo y que es patrimonio cultural. Pero no queremos ni su imposición ni que su promoción sea a costa de lenguas que nos permiten comunicarnos y desenvolvernos en todo el mundo", ha apuntado.

   Asimismo, se ha mostrado contraria a "un Gobierno identitario y revanchista" y ha defendido que el nuevo Ejecutivo "debe trabajar la convivencia". "Hemos escuchado declaraciones estos días que no nos han gustado y nos preocupa que algunos quieran aprovechar su momento de gloria para cobrarse facturas que ellos creen están pendientes. En esos barros no vamos a estar", ha agregado.

"DUDAS" SOBRE EL ACUERDO PROGRAMÁTICO

   En relación al acuerdo programático alcanzado entre Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e I-E, María Chivite ha subrayado que los socialistas tienen sus "dudas" sobre el mismo, ya que, según ha dicho, es "muy genérico, a pesar de su extensión" y además "no hay una cuantificación de ninguna medida".

   "Son solo algunas de las cuestiones que nos generan dudas e inquietud de lo leído en ese acuerdo. Ahondaremos más cuando los consejeros comparezcan en el Parlamento y escuchemos lo que tienen que exponer", ha manifestado.

   Así, ha incidido en la idea de que los socialistas estarán "vigilantes" con el nuevo Gobierno porque "nuestro compromiso con la sociedad navarra es el de hacer una oposición constructiva, propositiva, seria y alejada de bloques y de enfrentamientos".

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN