Elliot Morley, antiguo secretario de Estado de Agricultura, fue suspendido del Grupo Parlamentario Laborista después de admitir que pidió 16.000 libras (17.760 euros) a cargo del erario público para una hipoteca que ya había pagado.
El anuncio de la suspensión lo hizo Gordon Brown, durante la presentación de la campaña del Laborismo para las elecciones europeas del próximo mes de junio.
Brown subrayó que se tomarán medidas “disciplinarias” si es “necesario”, mientras la ejecutiva del partido gubernamental estudiará el caso la próxima semana, lo que ha desatado los rumores sobre la posible expulsión de Morley de la formación.
El ex secretario de Estado argumentó que su petición fue un “error” derivado de una “contabilidad descuidada”, y añadió que ha devuelto el dinero.
Anteriormente, el diputado Andrew Mackay dimitió como asesor del líder del Partido Conservador, David Cameron, tras reconocer que él y su esposa, la también diputada tory Julie Kirkbride, cometieron irregularidades en la solicitud de ayudas para una segunda vivienda a la que tienen derecho los parlamentarios cuya circunscripción electoral se encuentra fuera de Londres.
Ambos diputados son las primeras víctimas de un escándalo que destapó la semana pasada el diario The Daily Telegraph, que ha venido publicando desde entonces los gastos a cargo del contribuyente de diputados de los principales partidos británicos, incluidos Gordon Brown, otros miembros del Gobierno y David Cameron.
Según los observadores políticos, esta crisis podría provocar una elevada abstención en los comicios europeos del próximo 4 de junio.