El portavoz parlamentario de Ciudadanos en el Congreso de los Diputados, Juan Carlos Girauta, insta al Gobierno de Mariano Rajoy a que impida la colocación de las urnas en Cataluña para hacer un referéndum independentista y a que un juez pida las llaves a los directores de los colegios. En una entrevista con Europa Press muestra su esperanza en que el Ejecutivo de Mariano Rajoy haya aprendido del "error" cometido el 9N, cuando permitió la votación, le acusa de "cierto complejo" y le pide que no entren en el "marco discursivo" del nacionalismo.
El dirigente centrista considera que el Gobierno fue "muy torpe" ante el desafío independentista del 9 de noviembre de 2014, cuando no impidió que el Ejecutivo catalán colocara las urnas y consultara a los ciudadanos sobre la independencia.
Sin embargo, cree que "han aprendido de su error" porque "sino sería muy preocupante". Por ello, espera que en esta ocasión un juez acabe pidiendo las llaves a los directores de los colegios para que las depositen en el Juzgado.
En su opinión, esto "es muy fácil de hacer" y recuerda que el 9N los directores de los colegios recibieron una carta de la Generalitat diciéndoles que pusieran las urnas en los centros educativos. Si la situación se repite --ya que han adelantado que en septiembre habría referéndum por la independencia--, cree que deberían recibir "otra carta", esta vez de un juez, en la que se diga que "depositen las llaves del colegio el día de antes y las recojan el día después por la mañana".
Según Girauta, de esta forma "pasará lo contrario de lo que pasó" y en lugar de que todos los directores pongan sus centros a disposición, menos una directora que dijo que la medida era "ilegal", puede que se "de la vuelta" y ante la "conminación de un juez" hagan lo que les ha dicho éste, en lugar de hacer lo que les diga la Generalitat de Cataluña.
El dirigente de la formación naranja matiza que su crítica al Gobierno Central es distinta de la que hace a la Generalitat, ya que el Ejecutivo "está en la legalidad, defendiendo el Estado de Derecho". Aunque insiste en que "se equivocó" al "descafeinar la cuestión" y "diciendo que no pasaba nada" y que no tenía "efectos jurídicos".
CRITICA LOS "COMPLEJOS" DEL GOBIERNO CON EL NACIONALISMO
En su opinión, esta manera de actuar "sólo engorda al nacionalismo". Además, está convencido de que el Gobierno "tiene un cierto complejo" y "se mete en el marco discursivo de los nacionalistas".
"No entiendo por qué en cuanto pisan Cataluña se les pone cara de nacionalista a todos", exclama y recuerda que en Ciudadanos están muy bregados en esto que dicen, no les ha "contaminado el ambiente" y son capaces de defender lo mismo en su casa en Barcelona o en el Paseo de la Castellana de Madrid.
Juan Carlos Girauta dice estar "un poco harto" del juego de las agendas independentistas porque considera que el referéndum que están anunciando ahora ya lo han "vivido varias veces": "Es el día de la marmota, el eterno retorno".
En este sentido, recuerda que ya anunciaron un referéndum, una declaración de independencia y unas elecciones plebiscitarias y que después de hacer el referéndum y "perder" y unas plebiscitarias con un resultado que no les gustó, vuelven a decir: "haremos un referéndum".
"CABREO MONUMENTAL" DE LOS SEGUIDORES INDEPENDENTISTAS
Asegura que esta estrategia no engaña a Ciudadanos y sólo sirve para la gente que "quiere creer en ellos y quiere ilusionarse con ese proyecto". Sin embargo, considera que "cada vez engaña a menos gente" sobre todo "cuando han dicho tres o cuatro veces que para tal fecha habrá referéndum" o que los presupuestos de la Generalitat serán los últimos autonómicos y que los siguientes serán los de un Estado independiente y luego no sucede.
Por ello, dice que le cuesta mucho imaginar que los ciudadanos que creen en la independencia no tengan un "cabreo monumental" y que no piensen: "estos tíos me están engañando".
En opinión de Girauta, lo que quieren los independentistas es tener a todo el mundo discutiendo sobre su referéndum, pero afirma que él "ya no muerde del anzuelo" y lo que le parece raro es que "entre los suyos todavía alguien lo muerda". No obstante, cree que esto ocurre "cada vez menos" y señala que el 9N ocupaba un espacio en los medios de manera "obsesiva". Sin embargo, "ahora hablan ellos, los que lo montan".
Eso sí, quiere dejar claro que "no existe ninguna posibilidad de que alguien dentro de este territorio pase por encima de las leyes, declare la independencia y empiece a gobernar un territorio y no pase nada". "No va a suceder nunca", exclama y recuerda que, además del Gobierno, existe un Estado que "sigue funcionando exactamente igual".
"Aunque el Gobierno se pusiera remolón" existe el Tribunal Constitucional y "los tribunales de justicia no son el Gobierno", avisa ante quienes quieren "salvar la cara" diciendo que "se pueden buscar soluciones políticas". En su opinión, cuando alguien dice esto es que quieren decir soluciones "que no sean legales".
NINGUNA CONCESIÓN A LOS INDEPENDENTISTAS
Por ello, advierte contra tentaciones de hacer concesiones a los secesionistas que se han organizado para "imponer una vía de Estado por encima de la Ley". "A estos no hay que hacerles concesiones de ningún tipo", recalca.
No obstante, sí cree que el Gobierno tiene que pensar en los catalanes como en otros españoles porque tiene "preocupaciones comunes y específicas que, si no se atienden, hay gente que se podría querer meter en una aventura indeseable". Así cita la necesidad de una financiación justa, de invertir en infraestructuras como el Corredor del Mediterráneo.
Pero insiste en que no se debe confundir "el mejorar la vida de los catalanes con hacer concesiones a los separatistas" porque se estaría cayendo "en una trampa que alimenta el nacionalismo".
Para Girauta, una cesión "intolerable" sería incluir un "privilegio" para Cataluña en la Constitución española, como que tuviera un régimen fiscal distinto al que pueda tener otra CCAA o que se establecieran niveles competenciales distintos para Cataluña.
En este sentido, asegura que los "reinos de Taifas" y la búsqueda de las diferencias no están en la concepción ilustrada que defienden en Ciudadanos. Se trataría, recalca, de "un paso atrás" también en la construcción de Europa. "Si estamos en un plan que nos conduce hacia la paulatina cesión de soberanía hacia arriba, cómo vamos a hacer cesiones de soberanía hacia abajo, estaríamos desandando el camino de la historia", concluye.