La portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, ha iniciado la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, visiblemente emocionada
El jefe de Gobierno, Pedro Sánchez, ha suspendido este viernes el viaje a Barcelona para seguir de cerca la evolución del exvicepresidente de Gobierno Alfredo Pérez Rubalcaba, ingresado en el hospital Puerta de Hierro de Majadahonda, en Madrid, adonde la familia socialista ha acudido para arropar al histórico dirigente.
La portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, ha iniciado la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, visiblemente emocionada, subrayando que Rubalcaba sigue "luchando por su vida" después de que el miércoles sufriera un ictus que le mantiene ingresado en un estado de "extrema gravedad".
"La lucha por vivir de Alfredo Pérez Rubalcaba es la lucha de todos" ha dicho Celaá, que también ha destacado que el histórico dirigente "siempre tuvo el Estado en su cabeza" y es "uno de los mejores intérpretes del socialismo español".
Fuentes del Ejecutivo han informado de que la cancelación del viaje, en el que Sánchez iba a acompañar al rey en la inauguración del Salón del Automóvil, se debe a que tanto el presidente como toda la familia socialista están pendientes del estado de salud de Rubalcaba, ingresado en el Hospital Universitario Puerta de Hierro de Majadahonda tras sufrir un grave infarto cerebral, el pasado miércoles.
El estado del exvicepresidente del Gobierno y ex secretario general del PSOE "sigue igual" que ayer, ha dicho este viernes Gregorio Martínez, el que fuera su jefe de gabinete y que ejerce de portavoz de la familia.
Este viernes han acudido al hospital a mostrar su apoyo el ministro Josep Borrell, el exministro de Fomento José Blanco, el exportavoz parlamentario Antonio Hernando, el exministro de Trabajo Valeriano Gómez, el diputado Rafael Simancas, el exconsejero vasco de Interior Rodolfo Ares, el socialista vasco Eduardo Madina y el exsecretario de Estado Diego López Garrido.
En la jornada de hoy también ha pasado por el centro hospitalario el exlíder del PSOE madrileño y uno de los mejores amigos de Rubalcaba, Jaime Lissavetzky; el exnúmero tres del PSOE, Óscar López; el defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, la exministra socialista Carmen Montón y la ex vicesecretaria general del PSOE Elena Valenciano.
Además, han desfilado por el hospital el presidente asturiano, Javier Fernandez; el exministro Miguel Sebastián, el expresidente del Senado Juan José Laborda, el popular José Ramón García Hernández y la diputada socialista María González Veracruz.
El histórico dirigente está ingresado sin cambios en su delicado estado de salud y acompañado solo por la familia.
Rubalcaba se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del citado centro sanitario, donde se le ha aplicado el protocolo diagnóstico y terapéutico habitual.
También han expresado su consternación por la salud de Rubalcaba el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, y el de Aragón, Javier Lambán.
El presidente aragonés se ha referido a Rubalcaba como uno de los hombres de Estado "de más nivel y más entidad que ha dado la España democrática".
Para Lambán, Rubalcaba ha sido la "mejor cabeza política", un "magnífico portavoz parlamentario y vicepresidente del Gobierno", un "magnífico gestor" de la educación y alguien que llegó a la secretaría general del partido en un momento "delicado y difícil para el PSOE".
Desde el PP, el exministro de Interior Jorge Fernández Díaz, que como ha dicho prácticamente le sustituyó al frente de este ministerio, ha señalado que "la historia política de España de los últimos 30 años no se puede escribir sin Alfredo Pérez Rubalcaba".