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Viernes 15/11/2024
 

Galicia

La Policía toma declaración al entorno de la mujer muerta a puñaladas en Lugo

No hay detenidos por el momento y permanecen abiertas todas las líneas de investigación

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  • Archivo - Imagen de archivo de vehículos de la Policía Nacional

Agentes de la Policía Nacional de la comisaría de Lugo han empezado a tomar declaración a familiares, vecinos y amigos de la mujer de 42 años que fue hallada muerta con signos de violencia --el cadáver presentaba evidencia de haber recibido varias cuchilladas-- en Lugo.

El cadáver fue localizado en un piso de la Rúa Quiroga, en la ciudad de la muralla, la pasada noche. El caso lo lleva el Juzgado número 1 de Lugo y el levantamiento del cadáver tuvo lugar cerca de la madrugada.

El portavoz policial, el subinspector Manuel Arias Veiga, ha constatado que se trata de una "muerte violenta, un homicidio", y ha confirmado que el aviso se recibió "a última hora de la tarde-primera hora de la noche" de este domingo a través de un familiar.

A continuación, se activó el protocolo y se alertó a la autoridad judicial, asumiendo el caso el Juzgado número 1 de Lugo.

Para el levantamiento del cadáver se personaron en el lugar de los hechos agentes de la Policía científica y judicial para hacer las correspondientes inspecciones oculares que dan inicio a la investigación, que está bajo secreto de sumario.

"Se está tomando declaración a todo el entorno de la víctima tanto a vecinos, como familiares, como amigos, sin haber una línea cerrada de investigación. Están abiertas todas las líneas de investigación", ha puntualizado el portavoz de la comisaría de Lugo.

El portavoz policial ha asegurado que, por el momento, no hay ningún detenido.

En las horas posteriores al hallazgo del cuerpo, se apuntó a una posible detención de un vecino, pero el subinspector ha aclarado que el hombre simplemente fue trasladado de su vivienda a la comisaría porque no tenía otros medios para desplazarse, en un escenario en el que se toma declaración a los diferentes vecinos y al resto del entorno de la víctima.

La mujer de 42 años regentaba una frutería en el barrio de La Milagrosa, donde era muy conocida.

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