Una herramienta que facilita abordar las implicaciones medioambientales y socioeconómicas del comportamiento hídrico
Una investigación liderada por la Universidad de Granada (UGR) ha permitido desarrollar una técnica innovadora para predecir y comprender el movimiento del agua en el suelo, una herramienta que facilita abordar las implicaciones medioambientales y socioeconómicas del comportamiento hídrico.
Un equipo internacional de investigadores, liderado por el profesor de la Universidad de Granada Jesús Fernández Gálvez, ha logrado crear una metodología más precisa e innovadora con la que describir el comportamiento hídrico bajo la superficie.
El agua y las sustancias disueltas, como nutrientes y contaminantes, fluyen y se almacenan en el sistema poroso del suelo, que está formado por cavidades de una amplia diversidad de tamaños.
Esta diferenciación entre tamaños provoca numerosas dificultades en la medición de las propiedades hídricas del suelo que ha provocado el estudio de técnicas que permitan ajustar los parámetros de las ecuaciones y predecir el movimiento del agua.
"Estas técnicas son cada vez más utilizadas para la estimación de las propiedades hídricas del suelo. Sin embargo, tienen el inconveniente de no proporcionar un conjunto de parámetros único, sino que diferentes conjuntos de parámetros pueden ofrecer el mismo tipo de resultados", ha detallado el profesor Fernández Gálvez.
El grupo de investigadores liderado por la UGR ha conseguido desarrollar una técnica que permite determinar las funciones hídricas del suelo según principios físicos y dar así una combinación de parámetros única.
La solidez de esta metodología permite incluso estimar todos los parámetros hídricos del suelo, haciendo uso exclusivamente de medidas de retención de agua y del valor de conductividad hidráulica a saturación.
Los resultados de esta investigación contribuyen a mejorar los modelos de simulación hidrológica y climática en el planeta y es también aplicable a otras técnicas de estimación de propiedades hidráulicas, ya sea en base al tamaño de las partículas constituyentes del suelo o mediante medidas de infiltración.
Una de las aplicaciones de este trabajo radica en predecir el impacto de las prácticas de manejo del suelo en la distribución del tamaño de los poros por los que circula el agua, con el objetivo de adaptar el manejo de suelos a los nuevos escenarios futuros.
"El incremento en la presión actual sobre los recursos naturales y las tendencias climáticas aumentan aún más la necesidad de comprender y predecir mejor el movimiento del agua en el suelo", ha añadido Fernández Gálvez, que ha recordado que el ciclo del agua afecta al medio ambiente, la producción agrícola y el resto de las actividades socioeconómicas.