Un total de 555 niños han participado durante este verano en los campamentos "Verano en la Alhambra", un programa educativo puesto en marcha para que muchas familias concilien vida laboral y familiar mientras que los más jóvenes conocen el conjunto monumental a través de visitas guiadas y talleres didácticos.

La directora del Patronato que gestiona el recinto nazarí, Rocío Díaz, ha explicado este miércoles que esta iniciativa ha estado destinada a niños y jóvenes de entre 5 y 17 años.

"Vivir un verano en la ciudad de la Alhambra es una experiencia inolvidable que permite a los participantes observar, contemplar, imaginar, investigar o crear, y todo ello en un ambiente estimulante de cooperación y convivencia", ha indicado.

Díaz ha agradecido a madres y padres que hayan depositado su confianza en la Alhambra, así como la implicación y el compromiso de los monitores del programa.

En esta edición también se han fomentado los valores excepcionales de un lugar declarado Patrimonio Mundial y se han combinado actividades didácticas con recorridos por el recinto monumental, algunos de ellos cerrados a la visita pública.

Esto ha permitido a los participantes acercarse a la ciudad palatina desde diferentes perspectivas y aprender a cuidar y proteger su patrimonio más cercano.

Durante una semana, los participantes se han distribuido por grupos, teniendo en cuenta su edad, de forma que para los más pequeños, de 5 a 7 años, se ha diseñado el programa titulado "El banquete de palacio" para fomentar una alimentación saludable, además de conocer cómo era la alimentación en la época nazarí, los productos que utilizaban o incluso las costumbres dentro de palacio.

Para los niños de 8 a 11 años se ha presentado el programa "La Alhambra de mis sueños", que ha propuesto un recorrido por diversos espacios del monumento nazarí, con el fin de que los participantes conociesen una construcción del pasado para crear una ciudad sostenible para el futuro.

Bajo el título "Altas son y relucían" se ha presentado el programa del grupo de 12 a 14 años, que ha consistido en descubrir cómo se edificaban y utilizaban las torres en la Edad Media.

Por su parte, los jóvenes de 15 a 17 años han profundizado en la historia de la Alhambra de forma muy diferente a través de la música, la poesía y la naturaleza mediante el programa "3,2,1... Retransmitiendo desde la Alhambra", que ha motivado a los asistentes a crear relatos y conversaciones, generando nuevas voces y nuevas miradas con dinámicas radiofónicas y podcasts, entre otras acciones.