El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, ha sorprendido al firmar un contrato con Passage Pictures para la creación de una película titulada 'Bandera Roja'. Este proyecto pretende narrar la historia de Rubiales, enfocándose en su vertiginoso ascenso dentro del mundo del fútbol y su posterior caída marcada por diversas polémicas.
Según información exclusiva obtenida por El Debate, el acuerdo se selló en Los Ángeles y actualmente se trabaja en la fase de guion. Aunque la elección de actores aún está en el aire, el interés mediático en torno a la película es alto, especialmente considerando el contexto actual de Rubiales, quien se encuentra a punto de regresar a España desde República Dominicana para enfrentar cargos relacionados con "adjudicaciones irregulares" durante su mandato en la RFEF.
El proyecto cinematográfico se distingue por su intención de abordar no solo la figura de Rubiales sino también las complejidades del poder en el fútbol profesional. A pesar de que la polémica acción de Rubiales al besar sin consentimiento a la jugadora Jenni Hermoso pudo haber catalizado el interés en su historia, la película se centrará en una narrativa más amplia que incluye su ascenso, su gestión y su controversia salida de la Federación.
El productor Uri Singer busca presentar una visión objetiva de los hechos, incluyendo diferentes perspectivas, como la de Hermoso. La finalidad es crear un relato que sea "atractivo y respetuoso" con la realidad, evitando posicionarse de forma parcial. Esta aproximación sugiere una exploración profunda de los eventos que rodearon a Rubiales, más allá del escándalo que marcó su cese como presidente.
Además de la atención mediática, Rubiales enfrenta investigaciones legales en España. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha realizado detenciones y registros en el marco de una operación que indaga en las "adjudicaciones irregulares" de contratos bajo su presidencia. Estas acciones han aumentado el escrutinio sobre Rubiales, quien también se enfrenta a posibles consecuencias legales por el incidente con Hermoso, con la Fiscalía solicitando dos años y medio de prisión por un acto "sin consentimiento ni aceptación".
