El dispositivo de búsqueda del escultor Manuel Caba, de 77 años, que desapareció tras el incendio que asoló su cortijo el pasado 6 de febrero, se ha dado por finalizado tras el rastreo de más de 500 hectáreas. Será ahora la Guardia Civil quien prosiga la investigación, que está pendiente del análisis de los restos biológicos localizados entre los escombros de la parcela.
El alcalde de Moclín, Marco Pérez, ha señalado a Europa Press que el dispositivo se dio por finalizado este pasado domingo en el transcurso de una reunión que mantuvo el equipo de gobierno con los familiares y representantes de los servicios de emergencia y los cuerpos que han participado en el operativo sobre el terreno.
Las labores han abarcado más de 500 hectáreas, con especial hincapié en una radio de dos kilómetros y medio respecto al cortijo del artista, llegando a pasar reiteradas veces por algunas zonas. Más de 500 personas incluyendo servicios de emergencia, cuerpos policiales, vecinos y efectivos de Protección Civil de diferentes municipios han llegado a participar en los trabajos para dar con el paradero de Caba tras el incendio de su parcela, el llamado Cortijo de la Miseria, en el que tenía su taller de forja y su vivienda.
El que sea una persona mayor que vivía sola, que no tenía vehículo y del que no se tiene noticia desde el día del incendio ha hecho que se baraje la hipótesis de que pudo encontrarse en el cortijo cuando se produjo el fuego, por lo que en un primer momento la búsqueda se centró en la parcela, si bien luego se extendió a los alrededores y los caminos que solía frecuentar.
Aunque no se ha dado con su paradero sí se han encontrado unos restos biológicos que han sido trasladados al Instituto de Medicina Legal para su análisis a fin de terminar, en primer lugar, si son humanos y a partir de ahí trabajar en su identificación, según han detallado a Europa Press fuentes de la Guardia Civil.
