Aunque ya lleva dos años en el Consejo de Alumnos y Representantes de la Universidad de Huelva (Caruh), acaba de estrenarse como presidenta. Residente en Bollullos y nacida en 1998, Rocío Natividad Soto Núñez está a punto de finalizar su doble titulación en Filología Hispánica y Estudios Ingleses pero tiene varios retos en mente: que Huelva acoja una asamblea nacional del CREUP, que los alumnos pierdan el “miedo” a presentar sus quejas y que en el Rectorado no olviden “que ellos están ahí por los estudiantes”.
Le ha tocado representar a los universitarios en una época muy complicada, en plena pandemia por el Covid-19. ¿Cómo lo está llevando?
Resulta un poco locura porque nos estamos encontrando de todo. En teoría durante todo el curso íbamos a llevar el escenario A, que contempla la presencialidad totalmente, pero está dando muchos problemas porque hay profesores que están evaluando cada uno como quiere. Desde el Rectorado se han enviado ya varios comunicados recordando a los profesores que estamos en escenario A pero se están dando muchísimos problemas sobre esto. Creemos que para el segundo semestre, aunque no es oficial, se quita el escenario A y se vuelve a la normalidad con la guía docente por todos los problemas que están dando las adendas.
¿Qué diferencia hay entre seguir la adenda y la guía docente?
Las prácticas cuentan más. En la guía docente los exámenes como tal no tienen un máximo de peso de la asignatura, en la adenda sí, tienen un 70%. Muchos profesores llevan el examen hasta el 80 o incluso al 100%. Eso con la adenda A no se podía hacer.
¿Cómo ha encajado la falta de clases presenciales?
Ha sido muy desmotivante y agobiante por el hecho de estar todo el día con el ordenador. Si llevas cinco o seis horas de clase en el ordenador y por la tarde tienes que ponerte a estudiar en un ordenador… Para la concentración resulta fatal, desmotivación al máximo y desconexión total. Agradezco estar en clases presenciales aunque sea con mascarilla.
¿Cómo lleva la llegada a la presidencia del Caruh?
Como he estado trabajado durante estos dos últimos años en él ya estaba metida en vereda a excepción de este interés de los medios de comunicación. Lo estoy llevando bien. Lo que me está sorprendiendo ahora es que nos estamos uniendo a movilizaciones que se están haciendo por Huelva y doy las gracias a mis compañeros por empezar a movernos. Me siento orgullosa de la plenaria y de los estudiantes porque se están moviendo por sus derechos por una vez.
¿Qué mueve a los universitarios a participar en este tipo de actos, como la manifestación del 4 de marzo?
Después de haber estado tanto tiempo en casa sin poder hacer nada supongo que tenemos la necesidad de contribuir, de movernos. Además son temas que nos afectan de una forma o de otra, como el tema de la sanidad, que no puedas pedir una cita porque está la atención saturada… Igual que el tema de las infraestructuras. Como estudiantes debemos ayudar porque también nos afectan y aunque no nos afectaran no podemos olvidar que algo menos de la mitad de la población de Huelva somos estudiantes y si los estudiantes tenemos tanta fuerza, ¿por qué no la usamos?
¿Ha notado directamente la falta de infraestructuras?
Muchas veces. El verano pasado tuvimos una asamblea de estudiantes a nivel nacional y nos quisimos presentar como sede para este mes de abril pero no lo hicimos porque nuestro problema son las conexiones de transporte. Viene gente de Galicia, de Madrid, de Valencia, muchos de ellos no tienen conexión directa… Ni siquiera la tienen de Almería, que están en Andalucía. Son cosas que nos limitan. Organizar una asamblea de universitarios de toda España a Huelva le vendría muy bien porque se celebrarían actividades para cien estudiantes que conocerían Huelva y eso es promoción para ella.
La concentración por las infraestructuras se ha fijado el 4 de Marzo como guiño al 3 de Marzo. ¿Qué siente cuando oye hablar de aquel movimiento por la universidad?
Siento que me hubiese encantado estar ahí. Soy muy revolucionaria en ese sentido, si tengo que salir a la calle, salgo a la calle. Ojalá se vuelva a repetir y volvamos a salir a la calle por lo que queremos y por lo que nos merecemos.
¿Estáis haciendo campaña para que vuestros compañeros acudan a la manifestación?
Sí, estamos haciendo memes para ponerlos en redes sociales y hacer publicaciones para incitar a que la gente vaya a la manifestación. Yo por mi parte también lo estoy haciendo personalmente. El vicepresidente de Comunicación va a ser uno de los lectores del manifiesto del 4 de Marzo.
¿Qué retos tienen los universitarios onubenses?
A nivel nacional una de las cosas por las que hemos estado luchando es por la Ley de Convivencia Universitaria, pero finalmente se ha aprobado un formato que no es el que queríamos. Respecto a la Ley Orgánica del Sistema Universitario queremos intentar cambiar varias cosas. Otra cosa que queremos conseguir es que las prácticas obligatorias se remuneren.
¿Qué objetivo le ilusiona más como representante estudiantil?
Tengo uno personal, quiero intentar que una de las próximas asambleas de la Coordinadora de Representantes de Estudiantes de Universidades Púbicas (CREUP) sea aquí en Huelva porque se le daría mucha visibilidad a Huelva. Como yo ya no estaré es algo que tengo que hablar con el equipo y que todos los que vayan a estar se comprometan a seguir con ese reto. Sería para abril del año que viene. Tienen que organizar el hotel, catering, visitas…Ya para la visitas hablamos con el Ayuntamiento para que nos pusieran un guía. Sabemos que esa facilidad la tenemos. Lo que más miedo me da es el transporte porque hay consejos que no tienen mucho presupuesto. Nosotros para lo chicos que somos tenemos un presupuesto bastante asequible pero, por ejemplo, Canarias tiene muchos problemas.
¿Piensa que se tiene en cuenta la opinión de los alumnos en la UHU?
Creo que sí aunque hay cosas que nos cuestan más trabajo y otras son más fáciles. Las aceras de una de las entradas de la Universidad de Huelva estaban fatal y conseguimos que las arreglaran este verano. Respecto al tema de las adendas, en plena pandemia una de las cosas que conseguimos desde el consejo es que los exámenes no pudieran valer más del 50% de la nota, de manera que con asistir a clase y hacer los ejercicios podías aprobar la asignatura. A nivel autonómico también trabajamos con las otras universidades públicas, desde la Asociación de Consejos Universitarios de Andalucía, ACUA, en el bono transporte aunque todavía no cumple con nuestro objetivo porque la Junta lo ha delimitado a 30 años y solo para empadronados y seguimos luchando para cambiarlo.
¿Se implican los alumnos onubenses con el Caruh?
Vamos a decir que al menos nos conocen, sobre todo gracias al vicepresidente de Comunicación, Chema Roldán. Gracias a él ahora la Universidad sí sabe lo que es el Caruh porque antes de él el Caruh era solo conocido por la fiesta que se hacía hasta hace cinco años. El Caruh era fiesta, musiquita y ya está. Cuando la fiesta se quitó el Caruh se olvidó y en el momento en que esta persona ha entrado en el equipo si te digo que llegan ciento y pico de mensajes al día a Instagram con preguntas y dudas es que no te estoy metiendo.
¿Qué consultas os hacen?
De todo. Desde periodos de documentación, becas de movilidad, becas Santander, MEC, dudas de todo tipo. Hay personas que no valoran nuestra labor pero la mayoría sí, al menos sabemos que sí que estamos ayudando. Siempre decimos que la persona más importante del equipo es Chema, mi vice de Comunicación, porque sin él todo volvería a lo mismo de antes y no podríamos tener ese contacto con los estudiantes. También hacemos directos de Instagram y twitch resolviendo dudas.
¿Cómo es la relación con el Rectorado?
Es buena, porque tenemos un grupo con la directora de participación estudiantil y cada vez que tenemos una duda ahí está ella respondiendo, pero sí que es verdad que hay cosas que echo en falta, hay cosas que fallan. Por ejemplo, está mal cómo nos hemos enterado de que se van a quitar las recuperaciones de septiembre para el curso que viene. Se ha aprobado en un Consejo de Gobierno en el que todavía no estábamos porque hay que renovar los cargos y nos enteramos por una junta de facultad. Tanto la rectora como la vicerrectora me llamaron tres o cuatro días antes de aprobarlo para darme la enhorabuena y me podían haber dicho “oye, que en el Consejo de Gobierno se va a llevar esto”. Nos sentimos un poco descolocados.
¿Cómo les afecta el cambio en las recuperaciones?
Aunque se aplique el curso que viene el final del calendario de este curso hay que cambiarlo totalmente porque el próximo curso se tiene que empezar antes para poder hacer los exámenes en enero, después en junio y las recuperaciones en julio. Son cosas que también afectan al curso de ahora y no nos parece bien que nos tengamos que enterar por una junta de facultad, que no es el eslabón más bajo de organización pero no es el primero que se entera de todo.
Al margen de los trastornos en el calendario de este año ¿está de acuerdo con el nuevo modelo de recuperaciones?
Hace un par de años ya querían hacer el cambio pero todos los delegados nos reunimos y votamos en contra. Sé que hay que regularizarlo y ponerlo en común con el resto de universidades porque las recuperaciones en septiembre están dando problemas para entrar en los másters y puedes perder un año de tu vida por temas de calendario. Por eso entiendo que se quiera cambiar el calendario pero no me parece bien que no se nos pregunte cómo. Los exámenes de recuperación se pueden hacer en febrero y julio o solo en julio. Hace dos años nos pidieron opinión sobre cómo los queríamos hacer pero esta vez han aprobado solo septiembre y punto. A mí personalmente me parece más lógico y más fácil para los estudiantes tener una fecha de recuperaciones para cada cuatrimestre pero el calendario que se ha aprobado es solo julio así que los exámenes de enero o los llevas todo el cuatrimestre o te la juegas.
También están cambiando las fechas para las becas…
Está un poco descontrolado todo. Las han adelantado a marzo y en esos meses la gente no sabe dónde va a residir ni en qué universidad va a estudiar. La universidad se puede poner pero… ¿y la residencia? Hay muchas cosas que cojean. Sé que lo hacen por nuestro bien, para que a principio de curso tengamos el dinero en la cuenta. La intención, chapó, pero no se pueden hacer las cosas a la ligera.
¿Cómo se llevan adelante los estudios y la representación estudiantil?
Tengo suerte porque tengo un buen equipo. El equipo que acaba de entrar es muy bueno, en el momento en que no puedo con algo nos repartimos el trabajo y de momento no tengo ninguna pega. Del equipo anterior solo nos quedamos dos personas para llevar todo el Caruh. Desde que han entrado los demás nos han ayudado. Ahora que estamos trabajando están ellos a full. Creo que es el mejor equipo que se puede tener. El antiguo presidente me dijo ”ten cuidado con el equipo, asegúrate de que es un equipo que te va a ayudar”. De momento estoy tirando gracias al equipo, yo no podría llevarlo sola.
¿Sentís que se valora bien al alumno de la UHU fuera de Huelva?
Creo que no se le da tanto prestigio a Huelva, supongo que por el hecho de ser una universidad pequeña. No se nos da el valor que tenemos. Creo que en general, independientemente de la universidad, se debería valorar que una persona haya sacado su carrera, que se haya esforzado donde sea y cómo sea.
La UHU siempre ha tenido como bandera el poder ofrecer la cercanía de una universidad pequeña. ¿Nota esa ventaja?
En mi caso, sí. Mi facultad es de tamaño medio y la verdad es que el trato con el profesor es mucho más cercano. En clase somos 20 o 30 personas y el profesor te va a conocer. Si tienes algún problema por lo general están dispuestos tanto en lo personal como en lo académico a echarte una mano. Yo eso no lo noto y nadie me ha dicho que no haya notado esa cercanía, por esa parte está bien.
¿Qué mensaje le haría llegar a sus compañeros para que se animen a participar en el movimiento estudiantil?
Yo no tenía claro si quería hacer una carrera universitaria, porque pensaba que la formación profesional tiene más salidas. Por eso yo lo que les diría es que estudien lo que les guste, porque es muy duro hacer cuatro años de carrera estudiando algo que no te guste. En el Caruh estamos ahí para lo que les haga falta a los estudiantes, ya sea una duda o un problema personal, incluso lo más raro que se les pase por la cabeza. Ponemos de nuestra parte para ayudar al estudiante porque, al fin y al cabo, nosotros estamos ahí por ellos y para ellos y queremos que valoren el trabajo que hace el consejo y, sobre todo, lo que hacen los representantes de titulación.
¿Conocen los alumnos los recursos que tienen para hacerse oír?
Los delegados de clase llevan los problemas menores que se pueden solucionar bien. En el momento en que se agravan o no se pueden solucionar entramos los representantes de titulación. Si una clase no está conforme con lo que está pasando en una asignatura lo que pueden hacer es recurrir al delegado de titulación y la queja se pone anónima y ninguno de los alumnos puede tener represalias. Eso es una cosa que normalmente no saben.
¿Se suelen poner ese tipo de quejas?
Creo que no he puesto nunca una queja a nivel de clase como delegada de titulación, no suelen ponerlas. Normalmente lo que se piden son dobles correcciones y tampoco porque a las personas les da mucho miedo por lo que los profesores pueden hacer contra ti. Pero puedes recurrir al defensor universitario, a nosotros… Son muchos recursos pero normalmente no se usan.
¿Por qué no presentan esas quejas?
Por miedo, el miedo es lo que los frena. Yo en su momento pedí una doble corrección y me dio miedo. No se hicieron las cosas bien porque no había representación estudiantil. Fue un ejemplo que yo pongo para que entiendan lo importante que es tener representación y ese mensaje quiero dejárselo.
¿Qué mensaje dejas para el Rectorado?
Que recuerden que ellos están ahí por los estudiantes y que sin estudiantes no habría universidad y que muchas veces no se les da la voz o la escucha suficiente a esos estudiantes que están ahí por ellos.
