El juzgado de lo penal número 3 de Ayamonte (Huelva) ha condenado a un vecino de Almonte a cuatro meses de prisión por enviar a su expareja un mensaje de texto en el que la insultaba y la amenazaba, a pesar de tener respecto a ella una orden de alejamiento por un presunto delito de violencia de género.
El juez ha considerado probado que el 27 de marzo y el 1 de abril pasados, el ahora condenado quebrantó una orden de alejamiento que tiene respecto a su pareja, enviándole mensajes de texto a la madre de su expareja, vecina de Lepe, y a ella misma, en los que la insultaba.
El mensaje incluía frases como "dejaste a tu hijo con tu madre mientras vivías la vida con los viejos y traficantes de Huelva y España".
A pesar de que en el juicio ha negado haber enviado los mensajes, y solo ha admitido el que envió a la madre de su expareja, se ha mostrado como prueba el propio teléfono de la mujer, en el que quedó registrado, así como el de su madre, al que envió un mensaje con la frase "que no me hable más, y de mí tampoco, que todos tenemos que callar, y mucho".
El autor de los mensajes no tienen antecedentes penales, de modo que no tendrá que cumplir la pena, pero la sentencia le advierte de que corte cualquier contacto con su expareja, bajo amenaza de ingresar en prisión por nuevo quebrantamiento de la orden de alejamiento.
